PECES DE COLORES
Cuando el pequeño palangrero se dirigía a la bocana del puerto para iniciar la faena una luna triste presidía la noche oscura, alobada. El mar estaba tenso y metálico. Todo hacía prever una buena pesca. Los marineros, residuos de mil tormentas del mar y de la vida, se afanaban en preparar las artes de pesca....