El VIAJE CUÁNTICO
Pagué la cuenta, besé a mi novia y salí del bar. Llamé al número que aparecía en Blablacar y al cabo de unos minutos llegó mi conductora en un Audi de color rojo. Una vez dentro del coche, la miré de soslayo e intuí que tenía unos treinta y tantos años. Sentía su mirada sobre...