#1.nuevos comienzos 

El aroma a café recién hecho inundaba la cocina mientras Zoe Morgan observaba por la ventana el cielo gris de Portland. Sus dedos tamborileaban nerviosamente sobre la taza humeante, anticipando su primer día en el Instituto Westview.
-¿Lista para conquistar el mundo, cariño?-, preguntó su madre, Ivy , con un acento venezolano que el tiempo en Estados Unidos no había logrado borrar.
Zoe esbozó una sonrisa tensa. -Tan lista como se puede estar para ser la chica nueva… otra vez-.
Se miró en el espejo del pasillo antes de salir. Sus ojos color avellana le devolvieron la mirada, enmarcados por una melena de rizos oscuros que había heredado de su abuela. Respiró hondo, ajustó la correa de su mochila y salió a enfrentar lo desconocido.
El Instituto Westview se alzaba imponente frente a ella, un laberinto de pasillos y rostros desconocidos. Mientras caminaba hacia la entrada, sintió las miradas curiosas de sus nuevos compañeros.
-¡Hey! Tú debes ser la chica nueva-, una voz alegre la sacó de sus pensamientos. Zoe se giró para encontrarse con una sonrisa radiante y unos ojos verdes chispeantes. -Soy Ava Martinez. Bienvenida a la jungla-. Zoe sintió que parte de su tensión se disipaba. -Gracias. Soy Zoe Morgan-.
«Bueno, Zoe Morgan, prepárate para el tour más rápido y poco ortodoxo de Westview», dijo Ava , enlazando su brazo con el de Zoe. «Regla número uno: evita la cafetería los martes. El puré de papa parece tener vida propia».
Mientras Ava la guiaba por los pasillos, señalando aulas y contando anécdotas, Zoe comenzó a sentir que tal vez, solo tal vez, este nuevo comienzo no sería tan malo.
Pero entonces, al doblar una esquina, lo vio. Un chico alto, de cabello oscuro y ojos que parecían guardar secretos del universo. Estaba apoyado contra los casilleros, con una chaqueta de cuero negra que gritaba «problemas» en cada costura.
«¿Quién es él?», preguntó Zoe, incapaz de apartar la mirada.
Ava siguió su línea de visión y frunció el ceño. -Oh, ese es Kaiden Howland. Mi consejo: mantente alejada. Es el tipo de chico que rompe corazones por diversión-.
Pero mientras Zoe observaba a Kaiden, algo en su postura, en la forma en que sus ojos parecían buscar algo más allá de los muros del instituto, le dijo que había más en él de lo que se veía a simple vista. pero…