UGIAG
«En el año 2030, los gobiernos del mundo se enfrentaron a una crisis sin precedentes. Los grupos de autodefensa, hartos de la corrupción y la ineficacia de las autoridades, comenzaron a tomar el control de vastas regiones. La ONU, alarmada por la creciente anarquía, aprobó y activó la operación «CONTROL TOTAL» para frenar y eliminar estas actividades. Durante más de 10 años, hasta el 2045, se libró una guerra brutal entre los grupos de autodefensa y los gobiernos unidos, una guerra que dejó un rastro de destrucción y una cantidad incalculable de muertes sin sentido.
Al final de la guerra, los gobiernos se unieron en un solo bloque para formar la Unidad Global de Investigación Anti Grupo (UGIAG). Esta organización tenía el objetivo de controlar cualquier movimiento de los grupos de autodefensa y evitar que lo sucedido en el año 2030 se repitiera. El símbolo de la organización es una balanza, representando el equilibrio, y el ojo que todo lo ve, significaban la resolución de este grupo por mantener el control del equilibrio en cualquier lugar donde fueran enviados contra los grupos de autodefensa que deseaban alzarse contra la autoridad gubernamental».
Fecha: 07/10/2047
Hora: 8:00 PM
Lugar: ESTADOS UNIDOS – NUEVA YORK
El líder de la UGIAG, Máximo Torres, recibió una llamada crucial de sus superiores en su oficina. La oficina de Máximo era un espacio amplio y austero, con paredes de un gris sobrio adornadas con mapas y gráficos estratégicos. Un gran escritorio de madera oscura dominaba la habitación, y detrás de él, una ventana panorámica ofrecía una vista impresionante de la ciudad.
Máximo, vestido con un traje oscuro y una corbata sobria, escuchó atentamente las instrucciones. Le ordenaron investigar la aparición de grupos de autodefensa en un lugar del mundo.
— Máximo, necesitamos que investigues la aparición de grupos de autodefensa en un país latinoamericano. Es crucial.
Máximo asintió, decidido.
—Entendido. Enviaré a unos de mis mejores hombres.
Colgó, sintiendo la presión del deber.
Hora: 8:10 PM
Lugar: NUEVA YORK
Esa misma noche, Benjamín, un hombre de cabello rubio recogido en una cola de caballo, con una expresión amigable y ojos azules curiosos, estaba junto a sus compañeros Eleonor y Tyson en la azotea de un rascacielos.
El rascacielos, una estructura imponente de acero y vidrio, se alzaba sobre la ciudad, con luces parpadeantes y el viento nocturno soplando con fuerza.
Eleonor, con su cabello rojo recogido en una coleta baja y una expresión cálida
y Tyson, de cabello corto y oscuro, con una expresión seria , colgaban a un hombre desde el borde del edificio, intentando sacarle información sobre los grupos de autodefensa.
Benjamín: «¿Vas a hablar o prefieres seguir jugando al columpio?»
El hombre, aterrorizado, insistía en que no sabía nada.
Hombre: «¡No… no sé nada, lo juro!»
Benjamín, soltando un poco más la cuerda, le dijo:
Benjamín: «No te escucho… ¿Podrías repetirlo?»
En ese momento, el teléfono de Benjamín sonó. Era Máximo Torres, dándole la misión y preguntándole si estaba ocupado.
Máximo: «Benjamín, ¿estas haciendo algo importante? necesito que salga inmediatamente con tu equipo a la misión»
Benjamín, de forma relajada , respondió:
Benjamín: «Nada importante, solo estoy disfrutando de la brisa de la noche»
Al atender la llamada, Benjamín olvidó que sostenía la cuerda y el hombre comenzó a caer hacia el suelo. Eleonor, alarmada, le indicó a Tyson que se encargara.
Eleonor: «¡Tyson, rápido, agarra la cuerda!»
Tyson, con seriedad, sostuvo la cuerda justo a tiempo para evitar que el hombre cayera al vacío.
Tyson: «Lo tengo.»
El ruido del hombre colgando gritando de miedo llamó la atención de Máximo.
Máximo: «uhm ¿seguro que no estás haciendo nada importante?»
Benjamín, distraído mirando las estrellas, comentó:
Benjamín: «No.. por cierto Las estrellas se ven hermosas esta noche.»
Eleonor se llevó la mano a la cara, frustrada, y pensó para sí misma que Benjamín era un idiota.
Eleonor (pensando): «Idiota…»
Benjamín, cansado de los rumores, preguntó a Máximo:
Benjamín: «¿Es cierto de la aparición de los grupos de autodefensa? porque siéndote sincero Máximo !ya estoy cansado de dar golpes al aire!»
Máximo confirmó que Benjamín y su equipo se encargarían de la misión.
Máximo: «Ese asunto se encargara de resolverlo tu y tu equipo, —respondió Máximo. —
» y por favor benjamín si las cosas se salen fuera de control…. !ya sabes lo que tienes que hacer!.» termino de decir máximo con mucho énfasis en sus palabras
Benjamín, sonriendo, dijo:
Benjamín: » !NAH! tranquilo si vamos nosotros.. creo que no será necesario activar esa medida.»
Máximo estaba a punto de darle más información sobre la ubicación de la misión, pero Benjamín cortó la llamada abruptamente y se dirigió a su grupo.
Benjamín: «¡Chicos! ¡Misión urgente! ¡Debemos salir ya!»
Eleonor, confundida, le preguntó:
Eleonor: «¿y cual es la ubicación exacta? ¿Quién nos recibirá?»
Benjamín, pensativo, se dio cuenta de que no tenia que haber cortado la llamada.
Benjamín: «¿De verdad no debí haber terminado esa llamada?«
Eleonor, nuevamente frustrada, se llevó la mano a la cabeza.
Eleonor: «No entiendo cómo Máximo sigue pasándote información a ti, a pesar de tu olvidadiza mente»
De repente, Máximo envió la información de la ubicación por mensaje. Benjamín, aliviado, dijo al grupo:
Benjamín: «No se preocupen !chicos!, ya tengo la ubicación exacta y hasta Máximo nos van a mandar un transporte para trasladarnos. Debemos partir de inmediato.»
Justo cuando estaba a punto de irse, Eleonor le preguntó a Benjamín si no olvidaba algo que era: !el hombre colgando de una cuerda en el edificio!.
Eleonor: «¿No olvidas algo?»
Benjamín se rascó la cabeza.
Benjamín: «si, pensándolo bien Eleonor… creo que dejé la ventana abierta de mi apartamento».
Eleonor, con una mirada impaciente, señaló al hombre que colgaba
Eleonor: «No, ¡él!»
Benjamín finalmente se dio cuenta.
—¡Ah, claro!
Dio la orden a Tizón de que soltara la cuerda y benjamín, con un empuje fuerte, lanzó al hombre hacia la seguridad del edificio.
Benjamín se acercó al hombre y, con una sonrisa, le preguntó:
Benjamín: «¿Vas a hablar o te quedaras toda la noche con nosotros jugando al columpio? «se acercó Benjamín al hombre, con una sonrisa desafiante.
El hombre, asustado, accedió a dar la información sobre el grupo.
Hombre: «Está bien… Esta bien! hablaré. Les diré todo lo que sé.»
Benjamín sonriendo de una forma intimidante le pone su mano derecha en el hombro al sujeto y dice:
Benjamín: «—Lo debiste haber dicho desde el principio, hombre. El miedo no debería ser hacia ellos los grupo de autodefensas, sino mas bien… lo que nosotros los agentes de la UGIAG podemos hacer. —Benjamín sonrió, disfrutando del momento.
Un helicóptero apareció, acercándose rápidamente.
Eleonor y Tyson se tensaron, sus miradas fijas en la máquina que descendía, iluminada por los focos. Era el transporte que Máximo había prometido para trasladarlos a la siguiente misión.
El viento azotaba la azotea, creando una atmósfera de urgencia. El helicóptero se estabilizó sobre ellos, su luz enfocándose en el grupo.
Benjamín, aún con la sonrisa, sintió un cambio en el aire.
La tensión creció mientras el helicóptero flotaba, buscando a Benjamín, Eleonor y Tyson, con el destino de todos ellos pendiendo en el aire.
continuara..
en la siguiente parte: «2 oportunidad»
!mucha gracias por su lectura!
SEGUNDA OPORTUNIDAD
Fecha: 08/10/2047
Hora: 07:00 PM
Lugar: Hospital
Despierto lentamente, sintiendo el peso de mis párpados mientras una voz distante resonaba en mi mente. La televisión esta encendida en mi cuarto, transmitiendo noticias en vivo sobre el incidente en el instituto. Escucho la voz de un periodista:
—«El país sigue celebrando la captura y muerte del asesino serial conocido como «Dos Caras». La policía ha confirmado que el profesor de educación física, Jason, era el responsable de una serie de asesinatos que habían sembrado el pánico en la comunidad tanto nacional como internacional. Dos estudiantes fueron encontrados heridos en el lugar, han sobrevivido al ataque y se están recuperando en el hospital. Según las últimas investigaciones, se ha descubierto que el asesino llevaba años planeando estos crímenes, utilizando su posición en el instituto para acercarse a sus víctimas. afortunadamente la policía actuó con rapidez y logró neutralizar al asesino, evitando más tragedias».
Mi corazón latió con fuerza al escuchar esta noticia. Abrí los ojos completamente; la habitación del hospital se materializó a mi alrededor.
Era de noche. Las paredes estaban pintadas de un azul pálido, y el zumbido de las máquinas me rodeaba. Me incorporé lentamente, sintiendo el dolor en mi cuerpo, un recordatorio brutal de lo que había pasado. A mi lado, Gary dormía en una silla, con un libro en la mano, y su rostro estaba marcado por la preocupación.
En un escritorio cercano, un médico me observaba con una sonrisa de alivio.
—Bienvenido de vuelta, chico. Nos tenías muy preocupados —dijo el médico.
—¿Dónde estoy? —pregunto, mi voz débil por la falta de uso.
—En el hospital. Has estado inconsciente durante cuatro días.
—¿Cuatro días? —repetí, sorprendido. La noticia me golpeó como un balde de agua fría. No podía creer que había estado en coma por tanto tiempo.
Mi mente se llenó de confusión y preocupación. Recordé a Alisa
y con un nudo en el pecho pregunté:
— Doctor ¿Y Alisa? Donde esta? ¿se encuentra bien?
El médico iba a responder cuando Gary se despertó de repente.
—¡Nathan, amigo! ¡Qué bueno que hayas despertado! —exclamó.
—¿Desde cuándo está despierto? —preguntó Gary, dirigiéndose al médico.
—Solo unos pocos minutos —respondió el médico—. Nathan, seguramente tienes muchas preguntas que hacer, pero serán tus familiares y amigos quienes podrán responderlas mejor.
El médico llamó a una enfermera y le pidió que avisara a mi madre de mi despertar. Luego se acercó a mí y dijo:
—Deberías sentirte afortunado chico. Las balas no tocaron huesos, solo músculos y causaron heridas superficiales en tu cara y hombro. Además tienes personas que velan por tu bienestar, como tu madre y Gary, que no se separaron de ti ni un momento. —El médico sonrió y añadió—: Gary ha estado tan pendiente de ti que parecía un enfermero más del hospital.
El médico se río, y Gary, apenado, murmuró:
—Esas son cosas que no hay que mencionar…
Aunque el médico solo estaba tratando de animarme, aún no podía creer si me consideraba «afortunado» después de todo lo que sucedió. Bajando un poco la cabeza, empecé a decir con falta de entusiasmo:
—Me siento afortunado de tener personas que se preocupan por mí.. pero no por lo que viví —dije, recordando el horror del incidente. La imágenes de aquel día, el caos, los gritos, y la sensación de impotencia regresaban con fuerza, y mi estómago se retorcía.
flashback
Fin de flashback
El médico asintió comprensivamente.
– !lamento mucho! que hayas pasado por todo eso chico pero siempre recuerda que en la vida, es normal que haya momentos difíciles. La única forma de superarlos es viendo el lado positivo.
Reflexiono sobre sus palabras, tratando de encontrar algo positivo en todo lo que había pasado. En ese momento, mi madre entra llorando de emoción y me abraza con fuerza.
—¡Nathan! —Exclamó entre lágrimas—. ¡Gracias a Dios estás bien!
La mezcla de emociones en su rostro era evidente: alegría, alivio, sorpresa y una profunda gratitud. Sus ojos brillaban con lágrimas mientras me abrazaba con fuerza, como si temiera que pudiera desaparecer de nuevo. Sentí el calor de su cuerpo, el consuelo de su abrazo, y, por un momento, el miedo se disipó.
El médico se levantó y dijo:
—Los dejaré solos un momento. Si necesitan algo, estaré afuera.
—Gracias, doctor —dijo mi madre, con la voz entrecortada.
—No tiene porque darme las gracias. Es mi deber como médico ayudar a las personas —respondió el médico, sonriendo—.
Luego el medico como ultima acción ante de irse se dirige a mi diciendo:
-«Por ultimo consejo Nathan, valora esta segunda oportunidad de vida que tienes. Disfrútala con tus familiares y amigos».
Después de que el médico salió, mi madre y Gary comenzaron a contarme lo que había sucedido mientras estuve inconsciente. Me explicaron cómo la policía me encontró en el instituto, inconsciente y herido. Me quedé atónito al descubrir que el profesor de educación física era en realidad el asesino serial «Dos Caras». También me contaron cómo el país había recibido un reconocimiento mundial por detener a ese terrible asesino.
—No puedo creerlo… —murmuré, tratando de asimilar toda la información. La realidad era un peso sobre mis hombros, y el miedo a lo que había pasado se mezclaba con un rayo de esperanza por estar vivo.
—Fue un shock para todos nosotros —dijo Gary, con una expresión seria.
Tenía muchas dudas sobre lo que mi madre y Gary me habían dicho. La muerte de Jason no había sido por los policías, sino por un caza asesino. además ¿Cómo podía ser cierto su muerte? Yo lo había visto salir del liceo después de aquel suceso. Su figura aún estaba grabada en mi mente, y no podía aceptar que estuviera muerto.
Mientras pensaba en esto, un nudo se formaba en mi estómago. ¿Qué había realmente ocurrido? Cada pregunta era un golpe en mi pecho. Pero, a pesar de todo, mis pensamientos volvían una y otra vez a Alisa.
Con el corazón latiendo con fuerza, miré a Gary, que parecía más serio que nunca. Necesitaba saber sobre Alisa. Con la voz entrecortada, finalmente pregunté:
—¿Y que hay de Alisa?. porque es extraño que de toda las cosas que me han dicho ustedes !no la hayan mencionado a ella! —pregunté nuevamente, notando el silencio incómodo que siguió.
Gary y mi madre intercambiaron miradas, y su silencio solo aumentó mi preocupación. Justo en ese momento, la enfermera abrió la puerta de la habitación.
—Hay personas preguntando por ustedes —anunció, dirigiéndose a mi madre y a Gary.
—Ya me ocupo de eso —respondió mi madre. Luego se acercó a mí y me dijo—: Volveré en unos minutos. Por favor Natán, no te esfuerces dada tu condición.
Aproveché el momento para pedirle disculpas por haberla preocupado durante el tiempo que estuve inconsciente.
—No es tu culpa, cariño. Lo importante ahora es tu recuperación —me respondió con cariño, su mirada llena de amor y preocupación.
Mi madre me dio otro abrazo, diciendo:
—No sabría qué haría si te pasara algo —dijo mi madre, su voz temblando mientras una lágrima resbalaba por su mejilla. Su abrazo se apretó aún más, como si cada instante que habíamos estado separados la hubiera dejado vulnerable. Sentí su miedo, una preocupación profunda que resonaba en cada palabra, como si estuviera reconociendo lo frágil que era la vida y cuánto significaba para ella tenerme de vuelta
Después de unos segundos, decidió dejar la habitación para atender a las personas que la están buscando. Antes de salir, Gary se acercó a mí y me entregó una carta.
—Es de Alisa. La respuesta a cómo está ella la encontrarás en esta carta —dijo, entregándomela.
Gary también salió de la habitación después de entregarme la carta. Al final, quedé solo con la carta de Alisa en mis manos, nervioso por abrirla e imaginando lo peor. Mientras sostenía el sobre, sentí una mezcla de esperanza y temor. ¿Qué me diría Alisa? ¿Estaría bien? Mis manos temblaban ligeramente mientras contemplaba el sobre, sabiendo que las respuestas que buscaba estaban a solo un paso de distancia, pero temiendo lo que podría encontrar
Escena adicional
Fecha: 08/10/2047
Hora: 07:20 PM
Lugar: Hospital
Gary salió de la habitación de Nathan, todavía preocupado por su amigo. Al ver a la enfermera, se acercó y le preguntó en voz baja:
—¿Quién es la persona que esta buscándome?
La enfermera, con una expresión seria, señaló discretamente hacia un hombre misterioso que esta cerca.
—Es aquel hombre con el sombrero que oculta su rostro —dijo antes de seguir su camino.
Gary se giró lentamente y vio al hombre con el sombrero. La tensión en el aire era palpable mientras Gary se acercaba, sus pasos resonando en el pasillo vacío. Al estar frente a frente, Gary susurró unas palabras para que nadie más pudiera escuchar:
—Debe haber una razón muy importante para que tu.. padre salga a un lugar público con tanta gente…
El hombre misterioso apenas reaccionó a la pregunta de Gary. Con una voz grave y tranquila, respondió:
—¿Hasta dónde estás dispuesto a llegar por ese chico? Hay revelaciones que dicen que la sombra de la muerte está cerca de él, y cualquier persona que esté a su lado compartirá su destino.
Gary, sin inmutarse, replicó con firmeza:
—¿De verdad viniste solo para hacerme esa estúpida pregunta? Si crees padre que con esa advertencia me alejaré de Nathan, estás perdiendo tu tiempo.
El hombre misterioso esbozó una leve sonrisa antes de girarse para marcharse. Mientras se alejaba, lanzó una última advertencia:
—No olvides hijo la herencia que llevas en tu espalda. Si sigues dejándote llevar por tus emociones y no cumples tu camino espiritual, sufrirás un final inesperado.
Gary se quedó inmóvil, observando cómo el hombre desaparecía en la oscuridad del pasillo. Sus pensamientos se volvieron hacia Nathan, su mirada fija en la puerta de la habitación de su amigo, mientras una sensación de inquietud se apoderaba de él.
continuara..
En la siguiente parte de la historia «reencuentro amistoso»
!mucha gracias por su lecturas y no se olviden por favor hacer sus votaciones! de Natán guzmán
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