Boleto al viento
Pensé mientras el coche se lanzaba contra el muro que no daría reversa, era el viaje que había soñado por meses y meses y no permitiría que sus celos e inseguridades me quitaran el boleto que tenía. Él, por su parte, tuvo el descaro de plantear un chantaje, si te vas –dijo- regreso a casa...