Salir del escondite…
Su barba y su melena expuestas al viento le devolvían un profundo sentimiento de equilibrio y empoderamiento. Ya pasó el tiempo de recluirse, de sentirse diferente y de la incomprensión. Era momento de mostrarse. Ahora que la hecatombe atacaba con fuerza y el miedo se apoderaba de todos en sus cárceles de neón, sintió que...