Su presencia ausente
Su barba y su melena expuestas al viento ondeaban en mí, musicando una sensación de fulgor que descubrí, tal hoja encaramada en mi razón intuí, despeinados los cabellos a sus designios sucumbí, exhalando sus lamentos con garras me defendí, ya que un tesoro confinado poseí, retuve su bondad en un mundo de frenesí, inspirando los...