El legado de un genio
«La obra tendrá que estar terminada dentro de un mes, sin retrasos de ningún tipo. Percibirás por ello la suma acordada», —dijo secamente el criado del Conde F., retirándose tan rápido como había llegado—. La abominable máscara que le cubría el rostro parecía más una continuación de su cuero cabelludo que una careta. Wolferl cerró la...