Cotidianidad de un inmigrante
Todas mis mañanas iniciaban del mismo modo, con ganas de que no iniciaran completamente. Cuatro horas de sueño nunca serían suficientes, pero ya me había adaptado. Desde que inmigre había pasado por muchos trabajos y actualmente tenía dos empleos que me ayudaban a mantener a mis familiares en mi país natal. Era una tarea difícil,...