LA MUJER QUE NO LO ERA
Al fin de cuentas estaba sola. Diez años atrás, charlando con varias mujeres de mi profesión, cuando celebrábamos el haber ganado una convocatoria con la propuesta Ciudad educadora, sentadas en pleno centro de Medellín en el clásico y re-contra conocido café Versalles, había alardeado de que “mi marido gana muy bien y quiero salirme del...