Una danza cualquiera (relato infraordinario)
Entró súbitamente entre la puerta y los rayos de sol, cual niño travieso y con fuerza recorrió cada rincón del cuerpo cambiante de Evelyn, y se detuvo, constantemente a acariciar sus pulmones, bailó lentamente con su ritmo al respirar y pasó delicadamente sus dedos por cada línea de su cabello; Evelyn parpadeó, se dió cuenta...