El viaje inevitable
Recuerdo mi sorpresa al enterarme de esta partida. Me abrumó la inevitabilidad. Realmente me costó trabajo caer en la cuenta de que no tenía opción. Al pasar el tiempo fui haciéndome la idea. Y terminó por agradarme. El problema fue, desde luego, la ansiedad. Sabiendo que en algún momento sucedería, me desesperaba no tener el...