Fuerza y más fuerza, pues la necesitamos.
Siéntate y escucha. Levántate cabreado y demuestra ser ducho. Sé un alma alabada, una mujer que lucha, un hombre liberado. Sé miedo sin susto, sé fiera educada, sé mentira astuta; pues el odio cansado siempre ama de luto. Cambia y deja tumbada a la mediocre burla. Aprende a ser odiado sin respeto ninguno. Sé mujer...