Sinfonía del grito

Gritos aquí y allá, gritos de alegría, gritos de enojo, gritos de ansiedad, gritos de hambre, toda clase de gritos. En ocasiones, me gustaría tener un momento tranquilo, agradable, en paz, oír durante el día el silbar de las aves y durante la noche el murmurar de los grillos. Pero, la verdad extrañaría esos gritos de matices tan variados que, para mí, se han convertido en una hermosa melodía compuesta por la inmejorable y única sinfónica de “La mejor familia es la mía”.

No estoy acostumbrada a escribir acerca de mi familia, tal vez porque no encuentro nada interesante en ella y, aunque sea así, no dejo de quererla. Pude haber nacido en Estados Unidos, en Japón, en Vietnam, en Italia, en una familia millonaria o en una pobre, como hijo de escritor o de criminal, pero eso no importa, pues tuve la fortuna de tener una gran mamá luchona que siempre ve por el bienestar mío y el de mis hermanos, quienes en ocasiones insoportables no dejo de decirles lo mucho que los quiero, pero ellos no lo saben. Mejor paso al siguiente párrafo para no abrumarte, pues podría aprovechar para presentarte a cada uno de los miembros de mi familia y no creo poder acabar.

Con tantas cosas en mi casa, problemas, quehaceres, etcétera, es común escuchar a mi mamá decir:

“MIREya destapa LA SIFA, LAva LA ropa, sécaLA al SOL. Dile a FAbioLA que apague el FADO y que limpie alREdeDOr de su cuarto. Y dile a FAbián que no tenga MIeDO de LA FAMIlia de su novia, que RESIsta y no esté DOliDO, pues al final toDO será un buen REcuerDO”.

Me molesta que todo lo tenga que hacer yo, por qué no se lo dice a ellos, en especial a Fabián. Son sus consejos, no los míos. En verdad, no la entiendo.

Siempre he pensado que mi familia es la única que se comporta de esa manera. En mi mente se ha pintado la idea de vivir con la familia de algún amigo, deben ser más amables, de seguro no gritan y siempre tendrán todo en orden. Pero, que más, la familia no se escoge y, aunque la mía sea una sinfonía de gritos, no la cambiaría por nada. Pero bueno, basta de tanta charla y a seguir practicando las partituras que me marcaron por el profe. MI RE LA SI FA LA LA LA SOL FA LA FA DO RE DO FA MI DO LA FA MI RE SI DO DO DO RE DO.

FIN