Reminiscencia
En la cárcel, cada olor tiene su sentimiento. El hambre, la soledad, la tristeza y hasta la propia muerte tiene su esencia. Muchos e inconfundibles son cada uno de ellos. Pero sin embargo, hay un olor que no pareciera existir o pasa desapercibido y es el de comida. Pese a ello, uno de mis recuerdos...