Herencia
Bien es sabido que mi padre, don Eugenio Cienalmas, fue periodista desde muy joven, en épocas donde aquello se trataba más de un oficio que de una profesión. Tuvo un digno recorrido por la sección de opinión del antiguo Panorama y sus columnas sobre política generaban revuelo cada semana. Como el fruto nunca cae lejos...