Algo en ella no cuadraba – Lucía Ballester Bellver
«Qué asco de manos. A mala hora he aceptado yo a esta tía tan rara», pensó Emilio con aspereza, apretando el volante con fuerza. La chica que había entrado en el coche acariciaba su chaqueta algo tensa. Emilio no pudo evitar una mueca de incomodidad. Algo en ella no cuadraba. En la aplicación de BlablaCar ponía que se...