El Fiat 58
Entusiasmado por conocer Acapulco, no me importó viajar apeñuscado en el compacto Fiat de Manolo. De copilotos Silvia y sus dos pequeños hijos; los demás en el asiento trasero: Fernando, Chiquilín de casi dos metros de altura y yo, pero Arriba de nosotros, Martha, Lourdes y Patricia… Sin hacer alusión a su corpulencia. Una semana antes,...