La narración que sigue, nace de un certamen de microrrelato de 150 palabras máximo, sobre la primera vez de algo de cada quién.
Parecía Realmente Descabellado
¿Escribir yo?, le pregunté y posteriormente le dije al doctor sin esperar respuesta, ¡mi trabajo es anotar mi nombre y luego llenar planas de números y códigos!
¡Diversificación!, fue la orden tajante e inútil del galeno bendito pues, cuando me senté frente al teclado a cumplir con la instrucción, surgió una mágica comunicación entre el etéreo intangible, el teclado y mis dedos que, con prisa por decir estos últimos, asombraron a mis ojos al ir descubriendo su novedosa creación en la pantalla.
Es por eso que fue inútil la tajante orden del también maldito galeno pues, gracias a ella, vivo encadenado a una silla y su mesa, a mis notas y a un ordenador, a mi librero y la pequeña lámpara de junto que, junto con el consejo del doctor, también confabula para matarme de hambre desde cuando la primera vez.
Escritor Senovel.
Interesado por: Me interesa la literatura en un sentido amplio, sin predilección de género, Microrrelato, Cuento corto / relato breve, Novela corta / nouvelle, Novela de género (negra, histórica, ciencia ficción, entretenimiento…), Artículo / Crónica / periodismo literario, Ensayo / No ficción / Divulgación, Guión de cine o TV / Videojuego
Autores o libros favoritos: Julio Verne, John Ackerman, María Zarattini