Anibal Rodolfo Pfaffendorf | Club de Escritura Fuentetaja

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Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Wilde - Argentina

Número de obras:9

Lecturas de sus textos:553

Votaciones recibidas:15

Obras que ha votado:10

MI BIO
PREFERENCIAS LITERARIAS

Desde que tuve en mis manos, a mis doce o trece años, la maravillosa obra Moby Dick, no he dejado de leer. Mis ojos se han privado de muchos paisajes, lluvias y soles seguramente para recorrer infinidad de letras y adentrarme en miles de historias. Hoy, después de cincuenta años he decidido contar la mía, escondida entre líneas en mis cuentos breves. Espero que sean del agrado de los lectores, como así deseo sus críticas. Los invito humildemente a visitar mi blog: www.nuvelle.com.ar

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Interesado por: Cuento corto / relato breve, Novela en un sentido amplio, Biografía / autobiografía / diario / géneros íntimos / cartas, literatura personal

Autores o libros favoritos: William Faulkner, Haruki Murakami, Rüdiger Safranski, Paul Auster

Obras independientes de Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Verdades viejas

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

La foto ocupaba el centro de la circunferencia perfecta en la mesa de un discreto restaurante de San Telmo. Tenía las esquinas arqueadas por el tiempo y pegatina reseca en el dorso en donde podía leerse, con letra segura de lapicera a fuente: «Año 1948, 4to. Grado». Blancos, negros y grises se ubicaban en exacta...

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Vida perdida

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Decidí abandonar el pueblo. Las carencias en mi vida eran tan profundas que no tenía sentido continuar. Sin familia ni amigos que puedan contenerme, el aviso de despido en el lavadero de autos que por tantos años había sido mi única relación con ese mínimo mundo, fue el punto final. Abandoné mi cuerpo cansado sobre...

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Dos ventanas

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Pocas y débiles fueron esas primeras gotas que insistieron en castigar, sin lograrlo, el ventanal de mi balcón aquella mañana de domingo. Se arrojaban con osadía hacia la transparente superficie, deslizándose luego, guiadas por la gravedad, estirándose, marcando surcos angostos, confirmando predicciones de su presencia, que escuchaba y leía desde varios días atrás. Claro, era...

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Ausencias extremas

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

De pequeño me agradaba jugar a las escondidas. Resultaba muy bueno para eso y me atrevía a hacerlo con quien estuviera dispuesto a seguirme. Sabía escoger muy bien los lugares dentro de mi casa, en el parque o en el instituto. Con el paso del tiempo todos ellos jugaron conmigo. No necesité la cuenta regresiva...

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Hojas de vino y poesía

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Escasos metros tuvo que elevarse el avión al partir del único aeropuerto que allí existía, para que los negros ojos, jóvenes y curiosos de Hafiz pudieran ver en toda su extensión su lugar en el mundo. Shiraz, desde la antigua Persia, ciudad de las rosas, el vino y la poesía lo despedía quizás para siempre....

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En tu cama

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Amante opresora.Pérfida compañera.Te devoraba la vida esa inmensa depresión, amigo. Tan inmensa era que yo alcanzaba a verla.Sustancia, elemento, masa, podía palparse, tenía entidad. Te flagelaba en el encierro de tu cuarto umbroso, mugriento, de sábanas grises, en la casa de tu madre anciana que jamás traspasaba esa puerta, ignorando ella también tu presencia. Se...

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El parque de mis abuelos

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Quiero sentir que lo que se logra en la vidapoco menos es, que el intento de recuperar la infancia.Theodor W. Adorno. Retazos de recuerdos desordenados, hilachas de memorias. Patio mitad sol, mitad sombra, que ponía un límite a los juegos infantiles. Verano, a mediados de los ’60. Nuestras vacaciones, las que transcurrían para mi hermanita...

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Tren desde el abismo

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Eva. Su nombre era breve. Como su edad y como el horizonte de sueños que le brindaba la vida en un pueblo olvidado a miles de kilómetros de la ciudad capital. Con diecinueve años ya se sentía frustrada, sólo su imaginación le hacía intuir algo mejor, la posibilidad de salir de la mediocridad que le...

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El General

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Había sido un sueño recurrente en los últimos veinte años. Una imagen estática que aparecía fugazmente y me obligaba a despertar a cualquier hora de la noche. Durante el día seguía en mi mente, la recordaba en todos sus detalles, presente solo para angustiarme. Sí, ese era el sentimiento que me producía: angustia. No sabía...

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El viejo y la hojarasca

Anibal Rodolfo Pfaffendorf

Para Tomás L. esa noche no había sido de las mejores. Conciliar el sueño con tantas dudas y miedos dando vueltas por su habitación, resultó casi imposible. La lluvia constante tampoco lo ayudó demasiado esa vez a pesar que, en otras ocasiones, le había servido de gran inspiración. La vida en soledad permitió forjar en...

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