Liberación en Silencio

El inicio del fin…

Ella estaba abrumada, perdida en una espiral de pensamientos que no la dejaban escapar. A pesar de querer olvidarlo, él seguía ocupando un espacio en su mente. Se preguntaba cómo él había logrado seguir adelante mientras ella aún sufría. ¿Por qué seguía aferrada a esos recuerdos? Quizás era la atención que él le daba o la manera en que la hacía sentir especial. Sin embargo, también sabía que lo idealizó, pensando que él era el amor de su vida. Pero el último día lo cambió todo. Él mostró un lado oscuro, trató mal a su familia, e incluso su hijo se vio afectado por la situación. Ninguna excusa, ni su vida personal ni el alcohol, podían justificar ese comportamiento. Era doloroso seguirlo extrañando, sabiendo que la había lastimado profundamente. Las lágrimas fluían sin control mientras pensaba en él. No había señales, no había mensajes, solo un silencio que la envolvía. En ese silencio, sus pensamientos volaban, desgarrándola por dentro. Ella se culpaba, preguntándose si él la recordaba como ella lo recordaba a él, aunque en el fondo sabía que no debía importarle. Comenzó a borrar todas las fotos y los videos, cualquier cosa que la atara a su memoria. Sin embargo, lo que más deseaba era borrarlo de su mente y corazón. Sabía que tenía que soltarlo, pero el proceso era doloroso. Aún se preguntaba si él pensaba en ella, si había seguido con su vida o si ya estaba con alguien más. Intentaba ser fuerte, pero él seguía presente, aunque solo como un recuerdo que la atormentaba. Amar había sido fácil, pero olvidar resultaba ser una tarea monumental. Finalmente, algo cambió. Poco a poco, él empezó a desvanecerse de su mente. Las horas pasaban sin que ella pensara en él, y con cada día que pasaba, sentía cómo se liberaba del dolor. Era un proceso triste, pero necesario. Él la había desechado primero, y ahora ella se quedaba con las últimas palabras que él le dijo, recordando ese lado cruel que la ayudaría a soltarlo por completo. Estaba sanando, y aunque dolía, sabía que pronto encontraría la paz que tanto anhelaba.