Un día feliz

El sonido de una campana me despertó, mi primera imagen es el de un cuarto con aspecto antiguo, me siento muy desorientada y recuerdos de mis últimas dos decisiones se me vinieron a la mente, SER LIBRE y APRENDER NUEVAS COSAS.

Levantarse aquí no me es tan difícil como en la ciudad, y es curioso como mi mente se pone a hacer una lista de actividades que realizar el día de hoy.

Comienzo a cortar zanahorias para hacer tortitas y enciendo la bocina para que suene en mi habitación MANGO una canción que solo habla de amor; Salgo para recibir la energía positiva del sol y con mi desayuno en mano, me dirijo hacia el pasto para comenzar a desayunar, jamás imagine que algo tan simple como esta actividad me llenara de emociones buenas.

Recuerdo todo lo que tuve que sacrificar para llegar a esta paz y simplemente no lo cambiaría por nada en el mundo, miró hacia el cielo agradeciendo por un día mas porque aquí, un lugar lejos de todos mis conocidos me siento en calma y en paz. El sonido de una pelota impactando en mi cara me saca de mis ensoñaciones y un niño preocupado se acerca a mí pidiendo de vuelta su objeto, una risa imparable sale de mi, me levanto y se la devuelvo, aun sin terminar de reír, el niño un poco sorprendido simplemente me imita y ambos con risas imparables lo que se pensaría un problema, termina por no serlo.

Regreso a mi lugar y ahora mirando a mi alrededor, de repente siento un calor, como si alguien me abrazara y con mis brazos lo hago porque en el fondo se que es una confirmación de que tome la elección correcta.

Entonces en voz alta grito : HOY ES UN BUEN DÍA …