Los Gusanos de tu Vida

Sobre la cama cansada de espaldas
abres tus piernas frente mi
veo tu flor brotar, bañada en rocío
aroma de piel de mujer de la calle

tus pétalos húmedos invitando a desojar
tu jugo carnal gotea perfume barato
sobre la sábana vieja del hotel
llenando todo de olor putrefacto. 

Cama de revolcadas putas despeinadas.
Cama de viejos gordos sudados
morbosos mirando los espejos colocados
por las mentes macabras de la lujuria. 

Invitan tus piernas abiertas a consumirme en tu cuerpo
el ambiente hiede a basura
el ambiente está lleno cosas falsas
la cama está manchada de caldosas mezclas apestosas.

Hay sangre aquí
hay erecciones malditas
hay perdiciones y orgías
esta lleno este lugar de musgo resbaloso

Veo tus ojos rojos, tus labios rojos
veo como ardes
las llamas te desfiguran
el fuego recoge tu piel en pergaminos. 

Tus gritos al convertirte en cenizas me provocan
y te penetro con fuerza.
Los gusanos brotan por tu pecho
te pudres en esta cama.

Los gusanos forman remolinos en tu abdomen
y en tu miserable alma.

Solo eres un cuerpo que se revuelca
solo eres una fruta comestible a la vista
pero tu cascara engaña
eres corrupta del alma. 

Y vienes aquí y provocas al pervertido
al pasar tus contaminados dedos
por tus labios abiertos llenos de babas
espesas.

Te ves sucia,
tan sucia que quiero comerte
soy un mendigo y lo sabes
vivo lleno de mugre.

Busco entre los basureros por la noche
las miserables vidas amontonadas
busco sobros mal olientes
para embarrarme de ellos. 

Mi carne gotea ahora
en tus labios
somos iguales, no significo nada para ti
y no me importa. 

La basura forma parte de mi vida
y así, ardiendo como te veo
resucitas mis más bajos instintos
mis dedos recorren tu espalda.

Siento las sanguijuelas adherirse a mis manos
y chupar mi sangre
así como lames mi mojado sexo
siento que voy a acabar derretido en tu boca.

Tus labios aprietan y succionan con fuerza
mis manos arrollan tu cabello
mientras las contracciones repetidas
me sacuden, mis piernas pierden el control en temblores.

Todo acaba, siento cómo te atragantas de mi jugo
cuando exploto en tu boca
tu lengua se llena
quedo desvanecido y rendido. 

Y te alimentas de mí y de lo que queda, hasta la última gota

Miro tus ojos, pervertida miseria
miro tus ojos satisfechos, tu hambre ha sido saciada
y yo complacido me escondo,
la luz ha salido y me cubro de hojas. 

Espero la noche.