… Fueron las palabras de mamá mientras sostenía el teléfono contra su oreja y recibía, con lágrimas en los ojos y la cara colorada, las instrucciones del sanatorio, que le indicaban los pasos a seguir a partir de ahora. Me levanté de la cama y simplemente me quedé mirando al infinito, como si no pudiera comprender...
En un mundo de probabilidades infinitas estamos tú y yo, dos personas que tal vez no estaban destinadas a encontrarse pero que consiguieron una oportunidad de hacer posible lo que antes no hubiera imaginado...
Ya nada funciona para llamar tu atención. Ni mi olvido hacia a ti, ni lo que dejamos pendiente, ni nuestras promesas. Yo sigo al pendiente de ti. Pero no cargaré más con tu regalo. Me acostumbré a una vida con tu presencia en ella aunque no fuésemos un título. Ahora que si tenemos uno, que...