A veces tengo miedo de su inocencia, de su caminar tan impávido…

Ella dice: ¡¡son solo niños ese es su encanto!! – ¿Y es verdad… después de todo y aunque arrebatada la niñez de tajo con un sin sentido y con la voracidad de una fiera de monte, pues en algún momento todos fuimos niños e inocentes… pero que somos ahora? ¿En que nos hemos convertido? Pregunta la grande, la maja que viste en cuerpo de mujer pero que aún conserva el alma de esa niña que perpetua en su memoria y a quien se niega a dejar ir…

¿Qué somos? ¿En mis tiempos fui una niña dulce, alegre, elocuente… en que me dejé convertir?

Ella le responde: ¡en una mujer! ¡Pues en que más, o es que aún no te has visto en un espejo sin ropa… no has visto que ese cuerpo de niña se fue para no volver! Debes dejarla crecer o se incrustará dentro de ti y carcomerá tu espíritu. ¡Te frustraras!

¡¡No quiero!!

Como responden los niños cuando le mandas a recoger los juguete – ¡no quiero crecer! ¡No quiero perderle, ella es la que me mantiene viva! ¡La que me da esperanzas en este mundo inmortalizado donde los viejos quieren lucir jóvenes y las jóvenes quieren ser viejas para conquistar el alma de algún caballero prohibido… no quiero que mi inocente YO se marche y me abandone… perdería lo realmente valioso que hay en mí! ¡Tú me conoces, tú sabes como soy! ¡Sabes que aun creo en la bondad… que aun confío en la humanidad, que creo que se me acercan para darme caramelos y no para robármelos… creo en ti!

una Ella indignada exclama ¡¡Me aterra escucharte hablar así!! ¡No sobrevivirás en estos tiempos con semejantes creencias… tus hijos necesitan una madre no una hermana! ¡Debes crecer… la gente piensa que estas LOCA!

¡Mis hijos me necesitan a mí! Sea quien sea… será la única manera de poder enseñarles que para sobrevivir hay que ser auténticos… necesitan una persona transparente, que no les mienta, que los entienda y que los vea tal como son… quien mejor que mi yo, ¡mi niña! Si crezco, comenzare a ver el mundo como los adultos lo ven, ¡¡me desconectare de mi infancia e imitare a todos… me convertiré una oveja más del rebaño y seré invisible ante la mirada inocente de mis niños… perderé la esencia especial que define a los críos, mi luz se apagara… no lo puedo permitir!!

¡Loca! ¡Definitivamente está loca – le dice Ella al marido entrando por la puerta – No sé cómo la soportas! ¡Te arrastrara a su locura si no te alejas ¡ya! de ella… y tus pobres hijos sufrirán las consecuencias… ¡Yo no te críe de esa manera, tú tienes que ser un HOMBRE! No un niño por dios… que ridiculez…

El marido mirando a su mujer con ojos desprovistos de emociones… la besa en la frente y se retira… toma a los niños y se los lleva…

La mujer sumergida en sus emociones, no logra notar lo que acaba de suceder frente a sus ojos, después de todo aún sigue creyendo que la maldad pura no existe, aun cuando en su infancia la probó en carne viva… «Se marchó porque no entiende de que le hablo, ¡nos amamos… pero no entiende! ¡Tú mataste a su niño antes de crecer, lo forzaste a ser quien no es… frustraste su inocencia con demandas absurdas de hombría a destiempo… era solo un niño y jamás fuiste capaz de tratarlo como tal… quisiste que suplantara a tu marido! Y lo convertiste en el hombre que no tenías para tus propios intereses, lo hiciste tu esclavo y ahora no soportas que ya no esté a tu lado… por eso me llamas loca, ¡por eso no soportas verme a los ojos! ¡Mi mirada inocente te aterra… te intimida… te abruma saber que un alma que pudo haber estado perdida después de lo que vivió siendo tan solo una inocente niña aun conserve luz en sus ojos! La luz que los tuyos no reflejan. Mi alma se conserva pura y eso te consume… eres como los vampiros cuando ven el ajo. ¡Yo soy el ajo!»

Recuerda algo Ella, tu jamás has perdido a tu hijo porque el jamás ha sido tuyo… déjalo crecer para que veas como tu niño regresara a ti… dale el calor de madre que ha necesitado durante toda su vida y le has negado con tus críticas e insultos disfrazados de elogios irónicos detrás de los que te escondes… y si te sirve de algo saberlo, mi YO, mi NIÑA se compadece y te ama. Mi inocente alma jamás podrá sentir otra emoción que no sea el amor aun hacia los seres más despreciables que me ha puesto la vida enfrente… mi YO, mi niña, conoció a la tuya y entendió el adulto lastimado que eres ahora, sintió compasión por tu pequeña e inocente niña a quien dejaste morir a fin de fortalecerte… no te culpo, ¡no te juzgo! Mi niña jamás podría hacerlo, pero yo si… yo si te condeno por el daño que nos has infringido durante todo este tiempo y ahora en mis pocos minutos de madurez con la responsabilidad que se supone tienen los adultos, te pido: aléjate de nosotros, ¡márchate! Déjanos vivir de la forma en que somos felices y no intentes interferir más… tu tiempo de madre de niños ya paso, ahora eres madre de adultos y debes dejarlos ser…

¡Búscate una vida! Revive tus mejores momentos y déjalos apoderarse de ti, suelta la frustración que te ha acompañado a lo largo de tu historia y deja salir a la niña oculta, que será la única que te podrá permitir ser agradecida con lo bendecida que has sido… te dejara disfrutar de una forma realmente genuina de tus seres amados y te ayudara a sentir verdadero amor por quienes haz rechazado en tu vida por ser diferentes a ti… recuerda los niños jamás hacen eso!

Sálvate, aun estas a tiempo…

Salvémonos de caer en la desidia de la adultez, en la responsabilidad de encajar, en la presión de tener… probemos por un día vivir como niños con la sabiduría de los ya vividos sin que el aburrimiento mate nuestras mas inocentes fantasías…

V_CHNK02

Tu puntuación:

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS