club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
2013participaciones
Viajes encadenados (concurso semanal de microrrelatos) 1ª fase: del 30 de enero al 5 de febrero (hasta las 08:00 h)
2ª fase: del 6 al 12 de febrero (hasta las 08:00 h)
3ª fase: del 13 al 19 de febrero (hasta las 08:00 h)
4ª fase: del 20 al 26 de febrero (hasta las 08:00 h)
5ª fase: del 27 de febrero al 4 de marzo (hasta las 08:00 h)
6ª fase: del 5 al 11 de marzo (hasta las 08:00 h)
7ª fase: del 12 al 18 de marzo (hasta las 08:00 h)
8ª fase: del 19 al 25 de marzo (hasta las 08:00 h)
Su barba y su melena expuestas al viento. Igual que su cetro de fuego. En el epicentro del sempiterno, sobre una mesa larga, hecha de sueños y realidades, se halla él, con su radiante corona ceñida en la frente, túnica blanca y sandalias de cuero. A lado y lado, sobre doce sillas delicadamente decoradas, que...
Lastima que no haya billetes para maniquíes. Se echa en falta un viajero a la Ciudad Esmeralda deseoso de unir con firmeza sus articulaciones valiéndose del mejor pegamento. La búsqueda de la coherencia y la integridad. Un camino de baldosas amarillas cuyo recorrido se hace necesariamente a trompicones por lo inestable del adoquinado. También con...
En esta maleta no cabe casi nada, protesta mi hija. Mi deseo es que se lleve un poco de tierra, cielo de su ventana y todos mis abrazos. Cuando se lo digo, se fastidia, como buena adolescente. No es lo que queda atrás, lo esencial del viaje, lo sé, pero sus ojos cambiarán, estoy segura.
Lástima que no haya billetes para «maniquíes», se lamenta, mientras observa cómo sus «hijas» son apiñadas y encerradas en un container. En la huida, se dice, lo único importante es conseguir pasajes. Entretanto, esconde en su maletín los pasaportes.
Pensé -mientras el coche se lanzaba contra el muro – que aquella acrobacia suicida que realizó fue un acto de valentía. Pensé que es aterrador saber que hay mil trescientos cincuenta millones de coches circulando en el mundo entero. Justo su choche, justo ella, justo yo en ese punto. «Menos es más» gritaba antes del...
«Te regalé una bonita sonrisa de Joker» era la oración que escribió la profesora de Lengua para que analizáramos. Teníamos que hallar el sujeto, subrayar los adjetivos y encerrar en un círculo los sustantivos. Todos mirábamos a Luis de reojo. Era nuestro Guasón y ya lo habíamos encerrado socialmente para que permaneciera excluído. La profesora...
Te regale una bonita sonrisa de joker, al verte subir pero me agradaste. Salimos de Buga. Me toca el puesto de al lado; nos miramos alegres y nos vamos conversando fruslerías. Al entrar en el primer túnel aprovechamos para besarnos deliciosamente, hasta cuando vuelve la luz. Tomados de la mano entramos en el segundo, allí...
Te regalé una bonita sonrisa de Joker al reencontrarnos en el bus. Claro que no te diste cuenta, estás tan metida en ti que no podías notarlo y todavía me ofreciste tu mejilla para que besara, al despedirnos. Es una lástima que no seas capaz de entender nada, excepto lo que atiende a tus caprichos:...
Lástima que no haya billetes para maniquíes, ya que observo como ansías las aventuras que escribes, pero no las vives. Sanar todo este dolor que padezco, mientras inmóvil permanezco. Dejarte viajar libre y grácil como antaño y yo poder subir a cielo, es todo cuanto anhelo. Olvidaré esta horrible travesía cuando desde arriba empuje tu...
Te regalé una bonita sonrisa de Joker mientras disfrutaba del viaje como en una partida de póquer. No tenía miedo al fuego, ni a la balas, pero si a un «te quiero» sin ganas, a un abrazo sin fuerza, a un «por siempre» sin firmeza. No bastaba el riesgo, no era suficiente la adrenalina, eras...
A esta gatita aún le quedan muchas vidas por vivir, lugares que visitar, amores que olvidar. Sin embargo, no puede más que lamentar la ausencia de cuanto tuvo, aquellos días felices con mortales infelices que se fueron a un lugar del cual no volverán.
El veintidós ya es historia, me cansé de tan poco viaje y tanta palabra barata, de gente que escribe sin sentir, que habla sin pensar, que vive sin pagar peajes desde el cómodo sillón de su putrefacta ignorancia. Mi prosa expresa, pero no esta presa, es libre como mi verso, pero eso, ya veo que...
