club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
2008participaciones
Viajes encadenados (concurso semanal de microrrelatos) 1ª fase: del 30 de enero al 5 de febrero (hasta las 08:00 h)
2ª fase: del 6 al 12 de febrero (hasta las 08:00 h)
3ª fase: del 13 al 19 de febrero (hasta las 08:00 h)
4ª fase: del 20 al 26 de febrero (hasta las 08:00 h)
5ª fase: del 27 de febrero al 4 de marzo (hasta las 08:00 h)
6ª fase: del 5 al 11 de marzo (hasta las 08:00 h)
7ª fase: del 12 al 18 de marzo (hasta las 08:00 h)
8ª fase: del 19 al 25 de marzo (hasta las 08:00 h)
Él ya estaría tomándose un daiquiri en el malecón creyendo que la había matado. Ella entre la vida y la muerte en un hospital de la India… La habían avisado que tendría problemas, enamorarse de un narco no entraba en sus planes. Pensaba cómo lo habría conseguido: deshacerse de ella, vender la droga y viajar...
Lástima que no haya billetes para maniquíes. Maniquíes que andan sin pudor alguno por nuestras vidas, haciendo de la banalidad, la cosa más importante de nuestra existencia. Lástima que para entrar en el mundo real haya que pasar primero por la aprobación de la audiencia virtual. Lástima que no tengamos billetes para poder comprar la...
Te regalé una bonita sonrisa de joker esperando que te creyeras mi farol, el treinta y ocho todavía humeaba después del sexto y ultimo disparo. -¡Valentina tira tu arma! ¡Te apunto al corazón! – – ¿Crees que no sé contar? ¡Estúpido hombre! -. Contestó. La noche era fría y lloviznaba, mi brazo empezó a temblar....
Te regalé una bonita sonrisa de Joker y respondiste volviendo tus ojos al libro que estabas leyendo. Te vi desde mi asiento, estabas pegada a la ventana viendo desvanecerse la llanura áspera como esas películas clásicas pero proyectada en la ventana, el sol iluminaba todos tus lunares y esos risos me recordaron los tirabuzones que...
En esta maleta no cabe casi nada, es momento de emprender el viaje sin retorno dejando muchas experiencias que jamás volverán, ¿ya no cabe nada? ya no, porque el viaje es inevitable, nada nuevo que guardar como parte del equipaje. Llega el día, ¡Es el momento!, es el fin, simplemente porque no existe más la...
El ya se estaría tomando un daiquiri en el Malecón…..Eso pensaba Mirta cuando su avión sobrevolaba la costa oeste de su destino. Sus lágrimas se peleaban entre sí por salir las primeras de aquellos ojos que el había acariciado tantas veces….tantas , hasta que le dijo aquello de -«Mi amor, mañana vuelve mi mujer…..lo nuestro...
En esta maleta no cabe casi nada, por eso llevo las sombras de cada estación, de los puertos y aeropuertos que crucé, de las carreteras y senderos que caminé, y estas sombras me guían a mi próximo destino con mi corazón de trotamundos viajero, ligero de equipaje, que latiendo me susurra el comienzo de la...
A esta gatita aún le quedan muchas vidas por vivir, lugares que visitar, amores que olvidar. Sin embargo, no puede más que lamentar la ausencia de cuanto tuvo, aquellos días felices con mortales infelices que se fueron a un lugar del cual no volverán.
Él ya estaría tomándose un daiquiri en el Malecón, si Rolo no lo hubiera convencido de festejar antes de «terminar el trabajo»… No le había quedado otra que matarlo, antes que cometiera otro error que los pudiera descubrir. Iba a esperar a la perfecta oportunidad. Pero Rolo se le anticipó y trató de acuchillarlo. Dos...
A esta gatita aún le quedan muchas vidas por vivir, pensaba mientras observaba a su madre como metía en un saco, uno a uno la camada de gatos, luego le arrebató la mas bonita, añadió una piedra y le dijo: -¡Al río con ellos! No contaba que la bicicleta le llevaría otra vez a la...
¡El veintidós ya es historia! Le gritó preocupado su compañero a través del auricular. Y sin hacer caso al comentario del guía, siguió con los ojos enfocados en el camino. Pero para ser sincero estaba hipnotizado por esas ¿sombras? que corrían al costado de la carretera. Hubo un lapso de tiempo indefinido que nunca más...
Él ya estaría tomándose un daiquiri en el Malecón. Pensaba que así, en la distancia y perfumado con alcohol, conseguiría olvidarla. Sin embargo, no consigue dejar de verla reflejada en el cristal de la copa, ni ahogar el recuerdo de sus palabras en cada trago. Solo le queda, para exorcizarla, escribirla una carta interminable que...
