En algún lugar de la conciencia
El veintidós ya es historia. Mi historia. Apostaba al veintidós el día que te conocí en aquel casino portugués. Un veintidós, también, viajamos a Estoril para pasar nuestras vacaciones y allí concebimos a nuestro hijo. Otras tantas puñaladas contó el forense en el cuerpo del juez que te concedió la custodia, aunque puedes apostar a...