Cada dos semanas
En esta maleta no cabe casi nada. Era pequeña y amarilla, con flores y dinosaurios estampados. Sólo un par de mudas, una camisa y un pantalón. Lo acordado en el Convenio, aunque no podía dejar su T-Rex de goma a riesgo de recibir alguna mirada de reproche. Click. Otro fragmento de mi se perdía con...