club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
369participaciones
El taller de escritura: concurso de microrrelatos Admisión de originales: 15 de mayo a 17 de junio
Periodo de votaciones: 18 de junio a 9 de julio
Fallo del Jurado: 27 de julio
Ella, en el mismo lugar, mismo rincón; pero distinto. Recordando charlas desde el mismo número, pero distinto teléfono; y distinta ella, de aquella. Entrar, y estar la misma persona de la otra vez; pero ahora en distinto año; distinto mes. Y ella, cargando distinta mochila. La misma que se helaba, pero no importaba por sostener...
¿Invencible o sin sentido? Los días seguí cargando en mi manos, sin contar los segundos me siguieron pasando. Los dientes, los minutos largos de algunos años me fueron tumbando, y el sol mi cara quemando, por ello deje de bañarme, el mugre me protege, de todo hasta de la gente que imposibilitada por mi exterior...
Y era así como la recordaba, desde la última vez que la vi. Ya han pasado muchos años, pero ella sigue igual, mis entrañas aún se estremecen como aquella vez. Ahora no se que hacer, se donde encontrarla; pero no se como admirarla, como decirle que aún la amo. Es como una película de ciencia...
Aquí te estaba buscando, sin manera de encontrarte. Tú te fuiste sin decir adiós. ¿Por qué te fuiste sin buscarme? Ahora me quedan las letras, mi escritura. En ella revive nuestros momentos y nuevos, supuestos por mí. Revivir momentos de tortura, de dudas. Todo lo que fue hacia atrás aumenta en mi mente. Y aquí...
Ahí está. Sentada en la repisa de aquella azotea con sus pies colgando al vacío. Su cara angelical, refleja la angustia que debe soportar cada día. Siempre a la sombra de su hermano, quien a diferencia de ella, él sí es querido por todos. Ni él la consuela, sangre de su sangre, parece no entenderla....
El profesor dio la consigna de no dejar pasar a las palabras. Ordenó con expresión seria sin temple, que por un día viviéramos. Confundidos, estupefactos y cabizbajos, en pasos llenos de fuga, dejamos el salón. Poner vida a mi imaginación y viceversa, rompía límites. Vivir es más que existir e imaginar es más que pensar....
Nunca pensó que un «sí quiero» la llevaría tan lejos. Fueron momentos de alegría, de pánico, tranquilidad y dolor, un sufrimiento vivido en un día a día duro, largo y muchas veces gratificante. El día que su profesor se lo propuso sintió un calor que invadía todo su ser, miraba alrededor con vergüenza, pero ella...
«De niña un caniche me deshonró el brazo y desde entonces me da pavor el carmín.» Levanté la mirada: silencio. Me miraban, me juzgaban: valiente sandez. El papel empezó a temblar entre mis manos y sentí ese escozor en mi uretra, como las alimañas que se orinan al oler el peligro. Faltaba que uno de...
Cuando comencé a escribirlo, me di cuenta de que el relato iba de una relación epistolar de dos amantes que se envían cartas de amor, desde dos ventanas en edificios colindantes. La historia tiene que atrapar al lector -dijo el maestro del taller y agregó- no olviden otorgarle un conflicto. A medida que lo componía,...
Me senté frente al hombre con el que llevo compartiendo mi vida hace más de quince años: “Incluso he tenido hijos contigo -le miré a los ojos-, pero nunca un orgasmo”. Levantó la mirada del periódico y preguntó: “¿Orgasmo, y eso qué es? Algún día escribiré mi historia.
Es esa voz interna que siempre nos acompaña. Que está ahí cuando ya casi nada queda. Es esa amiga que te toma de la mano y te sacude de la cama. Y te toma entre sus brazos, cuando todo va bien y te anima a seguir por el camino. La esperanza te susurra a ti...
Suelo concentrarme. El ambiente invita, nos hace voz y, a veces, grito. El sol que enciende la ventana, el aroma del cafecito y la música que nos envuelve en una burbuja de cristal, que al menor roce se quiebra. Al verlo entrar, supe que eso iba a pasar. Algo en su actitud, en su andar...
