Fuerzas de seguridad del estado español aparecieron en mi domicilio y requisaron mi portátil, llevándome con ellos, ante la presencia del Rey de España.

Entonces, su majestad me dijo la verdadera situación por la que estábamos pasando, habían contrastado los hechos acontecidos hasta el momento, con lo que estaba escribiendo.

El Rey me hacía entender que depositaba en mí toda confianza para poder acabar con un virus que estaba por todo el mundo. Una de sus hijas y también su mujer, se encontraban infectadas por el mismo.

Hace unos cuantos años atrás, estuve ingresada en el servicio de psiquiatría en un hospital. Uno de mis pensamientos recurrentes por entonces, era saber las fechas y lugares donde el comando terrorista ETA, llevaría a realizar sus atentados en España.

El Rey confesó que gracias a mí, desmantelaron, toda la organización de ETA. Entonces bajo su consentimiento, me administraron electroschocks. Esto hizo que no me acordase de nada.

Desde entonces todos mis medios de comunicación habían estado vigilados, yo seguía un tratamiento de pastillas supervisadas por un psiquiatra.

Ahora de lo que se trataba era de quitarme la medicación y volver a mi estado normal, porque consideraban que de esta manera mis visiones volverían, pero si yo quisiese.

Yo no dude en prestarme en ayudar, pero con una condición. No tener que volver a tratarme con pastillas, nada de electroschocks y decirme la verdad en todo momento, manteniendo el secreto de mi identidad.

Eran quince días los que tuvieron que pasar para normalizar mi estado físico y mental, y dejar atrás la medicación. Me aislaron por completo, solo el Rey iba a verme mientras mis estados físicos y psicológicos volvían a su ser.

Pedí que me dejasen estar en primera línea para poder sentir y conseguir dar con la solución a la pandemia mundial.

Así fue, en una semana supe lo que estaba pasando y se lo comuniqué a su majestad el Rey. Todo quedó en sus manos.

Volví con mi familia y nunca más tomé pastillas, sentía todo lo que me rodeaba. Muchas veces, el Rey y yo mantuvimos largas conversaciones.

Tu puntuación:

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS