Mirame a los ojos, hablame a travès de ellos para saber la verdad que esconden tus palabras.

Mirame a los ojos y sabrè si tengo esperanzas; muestrame en ellos el consuelo de saber en què lugar de tu alma me encuentro…

Mirame a los ojos hoy, porque no puedo ver el resto de tu rostro, una corona tapa tu boca y lo que veo es una tela azul; pero mirame a los ojos y sabrè en ellos encontrar consuelo, sabrè en ellos si tengo esperanzas. Mirame a los ojos e intentarè de lo poco que tengo darte un aliento.

Mirame a los ojos para que en este poquito andar que podemos dar; no sea con el rostro viendo nuestros rastros en la tierra àrida, sino buscando otras miradas que nos den fuerza para continuar el andar.

Mirame a los ojos y dame con ellos tu mejor sonrisa, en ella me aferrarè hasta el dìa en que podamos volver a vernos «completos».

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