Un virus con corona, una corona de espinas, la corona de la conquista y de un imperio antes esplendoroso sucumbe ante un invisible enemigo.

Coronados de Gloria vivamos!!!, juremos con Gloria morir; pero no será por ese mal rey.

Será por nuestros malas acciones, malas decisiones, por nuestro aislamiento del bien hacer, del buen decir, del bien sentir y del buen vivir. Buen vivir que no es el egoísmo, sino el altruismo, la solidaridad y el tiempo dedicado a quienes todos los días vemos sin mirarlos, sin oírlos y sin tenderles un mano.

La coronación de la humanidad se avecina y solo restan cuarenta días!!!, nos elevaremos a la condición divina cuando al fin despertemos a la acción sublime de encontrarnos, de sabernos hermanos, no sólo entre nosotros sino entre todos los seres que habitan este mundo.

Coronados de Gloria Vivamos!!! que este tiempo es nuestro, que este tiempo aún no se agota, aún nos queda muchos caminos por desandar, mucha vida por celebrar y mucha alegría para regocijarnos.

La paz duradera se establece a la sombra de ésta corona, el mundo celebrará al fin la victoria de la unión sobre la muerte y la conspiración.

El fin está cerca!!!!; ha llegado a su fin el ciclo del odio y se afianza la proyección de la luz bienhechora que inundará nuestras almas para quedarse allí, viviendo y latiendo como una gran taquicardia de sentimientos buenos.

Sólo los reyes tienen corona y esos reyes somos todos nosotros!!!!

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