Eugenesia reparadora

El 31 de mayo del 2029 tuvo lugar el  último asesinato machista . El  delincuente, José Fernando  Eldeloshuevos  Colgando fue gaseado en la Prisión Federal de Folson, sometido previamente a  terribles torturas, como la  visualización en video de los discursos de Ministro  Montorovsky , cuando intentaba justificar sus amnistías fiscales.  La ejecución de JFEC  se realizó con escasa  cobertura mediática, pero no pudo evitar  la Antomía  ( la octava policía autonómica)  la  presencia de un grupo de feminazis que  jaleaban su muerte .

Para  mandar a JFEC al otro lado del Hades, se utilizó  una mezcla de Yperita ( gas mostaza) y  toxina purificada de mamba negra, certificándose su muerte a los 18 minutos.  “ Sufrió mucho, como una garrapata” , dijo la lideresa del Frente Liberador  Partenogenético, Lorenza Cardá. “ pero deberíamos de haberlo castrado previamente”, dijo, haciendo un gracioso mohín y quitándose una lagrimilla de cocodrilo.

Un cultivo frotis celular del ajusticiado, en  concreto  los telómeros  más  largos de su cromosoma sexual  Y   fueron  ultra purificados  durante los siguientes 15 años.

Sometido a terapia génica de recombinación con agentes alquilantes y fósforo radioactivo , en  Abril del 2044 se consiguió  aislar  un anticuerpo monoclonal quimérico que actúa sobre la amígdala cerebral de los individuos  susceptibles, lo cual produjo un 98 % de disminución de los  crímenes de  esa naturaleza.

El Ensayo Clónico en fase IV se dio por finalizado en 2049 y, tras otros seis meses  de intensas ostias a mano alzada negociaciones  con la Industria Farmacéutica , el Areópago  dio su placet  y  se consiguió el anhelado  fármaco:  Sapho 500.

Sapho 500 actúa generando una proteína reparadora de la ira blanca. Además,  administra inyectado subcutáneamrente en la base del glande, con una aguja de  las mas grandes del mercado, en teoría afirma el Laboratorio, para que no precipite durante el proceso de inyección ni sea  metaboilizado por la potente enzima mecagonlaputa -machista-liasa, que lo puede  destruir o inactivar hasta en el 0,3 % de los individuos por un mecanismo  de resistencia vehiculizado por plásmidos. 

Las autoridades sanitarias se han mostrado optimistas y prudentes.