Otra Humanidad (Sociedad)

El día de ayer, 20 de septiembre de 2050, puede convertirse en una fecha histórica.  Lernanur, la verde y brumosa isla que se proclamara estado hace treinta años,  ha hecho saltar por los aires todas las grandes Verdades de la Humanidad. La revelación de su secreto mejor guardado, la partenogénesis,  en su web oficial,  ha quitado la respiración a más de uno y ha elevado clamores al cielo por parte de los grandes líderes religiosos.

El núcleo duro del estamento científico de Lernanur ha aportado a las élites científicas, para su revisión y contrastación,  los resultados de los estudios genéticos realizados en su propia población hasta sus ancestros de finales del siglo XVIII; y aventura la hipótesis de que la partenogénesis puede haber convivido con la reproducción sexual  a lo largo de la evolución de la especie Homo, sin ser advertida. Se habría tratado de dos estrategias paralelas que se desarrollaron en el mismo espacio y tiempo donde una, la sexual, habría ganado inicialmente la partida y se habría impuesto, hasta ahora.  Pero, por diversas causa, que  están siendo analizadas y debatidas en los laboratorios de Lernanur, la partenogénesis  estaría cobrando vigor. Incluso, se está especulando con que cualquier hembra Homo sapiens pueda ser una partenogenética en potencia.  

Hoy al mediodía,  Irhe Mor, portavoz de la Academia de Ciencias de Lernanur,  ha reiterado en  conferencia de prensa  que el suyo  no es un estado femenino. Que,  si bien el fenotipo de sus habitantes se asemeja más al de las mujeres, no se puede decir que son mujeres en sentido estricto puesto que, biológicamente hablando, macho y hembra existen a efectos de la estrategia reproductiva sexual. Por lo tanto, en Lernanur no habitan ni hombres ni mujeres, sino una nueva  Humanidad. Homo sapiens, indudablemente, pero diferente.  También recordó que, para llegarse al Hombre actual, otros tipos humanos quedaron en el camino. “Percibimos con preocupación que donde la Vida ve un cambio más, el orden humano establecido ve una amenaza”, afirmó.

 ¿Será posible la convivencia en la Tierra de dos Humanidades distintas, aunque emparentadas?  El debate está servido.