Los ojos de Daniel
Te acabo de ver en los ojos de Daniel. En el desayuno, nuestro pitufo estaba metiéndose los cereales así, abriendo esa bocaza, y me recordó a ti. Me quedé unos segundos mirándole embobada y con una sonrisa inconsciente, mientras te recordaba. Daniel me pilló mirándole así, embobada, y me frunció el ceño, igualito que tú,...