Riquezas.

Entrañas de dolor tanjente que por mis dedos brotan,

ansias locas de escribirte bajo el vacío que denotan,

hablo de esos parques siniestros,

vagueaba mí mente en lo cierto,

esa imagen de una era robotizada por la riqueza,

dirigida, empobrecida,

dañe a mí ser creyendo que podríamos merecer,

mar, aire o simplicidad y muchos metidos ya en su propia vanidad,

creandonos un nuevo ser, pensamiento o forma de saber,

haciendonos creer que la tecnología arreglará nuestra vida y todo es algo mucho más profundo,

me escondo muchas veces bajo lo que soy para que no dañen mi alma,

gozamos de la simpleza y esa es mí real grandeza,

miro desde lo más hondo de mi corazón,

esa es la solución,

gano tanto sino escucho que cuando lo hago me destruyo,

si todos fuesemos iguales,

sin cosas vanales,

incluyendo el dinero es un mero ilusionismo del reino,

ese reino que cree que no puedes y ellos si,

haciéndote inferior a tus posibilidades,

escucha mis palabras no son casualidades,

cree en tu mero pensamiento, sin ánimo de aislamiento,

vive libre de mente y encontrarás la verdadera razón,

que su ego no te invada nunca el corazón.

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