Miércoles, un día agitado, caluroso, fuera de lo normal, yendo a casa, la ciudad es un caos, un alerta meteorológico esta previsto para hoy y mañana , la calle se convierte en un diablo embravecido que arrasa todo a su paso, un mar enojado y revuelto que grita con cada ola, humanos enloquecidos que huyen de este fenómeno..

llego a casa, un baño me espera, sobre mi cama el pijama preferido, en proceso un buen cortado expreso humeante espumoso y no tan dulce..

mi sillón me espera , el celular no deja de recordarme tareas y citas para el día jueves, comienzan los grupos de whatsapp a distenderse y enviar cuanto meme haya por ahí

Frente a mi computadora guardo en un pendrive escritos que debo presentar en una entidad bancaria, reviso emails, messenger, escaneo en formato PDF un documento para un trámite y juego un poco con face e Instagram, saboreando mi café y disfrutando el placer de haber llegado a casa

Ya el viento y la lluvia se adueña de la ciudad , y me encanta, el silencio se vuelve un bullicio de distintos sonidos de atrapa sueños de vidrio y caña

De repente…la energía se fugó, la luz se hizo noche 

mis dedos en el teclado se borraron, no podía creer, toda mi organización se truncó y me dieron ganas de llorar…dejo de sonar mi celular, la fibra óptica no funciona,  tampoco el wifi, los parlantes se callaron, no puedo preguntarle al Google que pasó,  me sentí perdida paralizada presa de la maldita tecnología, y reaccionando después de unos minutos pensé que la evolución esta devorando como Pacman al mundo.

Encendí una vela, y ese haz de luz reflejado en el ambiente me transporto a mi infancia, mire el teclado y me recordó la llegada al cielo en la rayuela, el mouse

 a ese ratón a cuerda que alguna vez usamos para hacer bromas inocentes y reír sin emoticones,  hemos dejado atrás al cartero, a los llamados telefónicos con aparatos de línea, a las radios con pilas, a los cassettes de cinta y hasta los DVD, las fotos en papel fotográfico para guardarlas en una nuble o en Google fotos Google Drive , o andar por la ciudad con un GPS y no memorizar el nombre de las calles y olvidarnos hasta de los próceres que las identifican,  no saber las fechas de los acontecimientos que cada uno logro , porque solo vemos en las fechas que son feriados puentes, hablar con una máquina al salir de un estacionamiento que nos indica el agradecimiento de la visita, a la vez mentimos nuestros rostros o figuras con filtros de Tiktok o avatares con juegos

juegos que invaden la inocencia de cada niño y les enseña violencia, o a juntar fichas desesperadamente para no perder, y mi inocencia me lleva a recordar el sonido de los ahorros de ese chanchito que Papá me regaló.

y estamos locos, corremos carreras contra software, nos peleamos con joystick, nos enamoramos a través de pantallas con vidrios templados, sufrimos con Netflix y lloramos con Amazon, jugamos carreras con nuevos modelos de Iphone, tomamos clases de Gym por Instagram , y hasta la presión online…..Bastaaaa

 quiero volver atrás , quiero hablar de frente con mi amiga, quiero sentir su voz cara a cara, quiero ver a una pareja mirarse a los ojos y disfrutar un momento sin una pantalla frente, quiero sentir el olor de la hoja vieja de un libro de biblioteca, quiero dejar la virtualidad y acariciar las etapas lentamente, quiero que los corazones flameen las remeras y dejen de ser fríos stickers, 

necesito parar y no puedo separarme de este 2021, quiero mi tiempo, aunque me ayudas y te necesito tecnología….no podemos parar el mundo si no estas……

Termino mi café …soplo y se desvanece la luz de la vela….hace una hora que huele silencio , sigue la tormenta , la lluvia roza mi ventana, hace frío y me siento liviana…ahora descanso

 Para mañana no hay alarma ..extraño mi reloj despertador…aún estoy desconectada y no pasa nada…. amanecerá como cada mañana….

SOCORRRO.. jueves .. otra vez lo virtual se comió mi niñez

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