Vida
Hoy, hijo mío, quiero contarte un cuento. No es un cuento fantástico, por lo que no habla de castillos, de hadas, ni de duendes. Trata de algo más bello; de sonrisas, de milagros y de amor por la vida. Llegaste con nosotros presagiando un desastre, largas noches de desánimo con promesas robadas y sueños truncados....