EL NOVIO AMBIVALENTE
Se acercaba el momento de la cita acordada en BlaBlaCar. Sobre la alfombra de alquitrán un destartalado descapotable amarillo chillón avanzaba hacia mí a toda pastilla. –¡No será verdad que ahí voy a viajar yo! –me dije–. Pero la tartana se detuvo. –Eres Luisa, ¿verdad? –. Por unos segundos dudé qué responder, pero no podía...