
Esta es una historia que se da en algún lado de la provincia de
Miranda; meses otras Oliver empezó a sentirse mal,, dejo de ser
aquel niño de 10 años, alegre, moreno y de pelo rizado que
conocían, comenzó a estar todo el tiempo cansado, tenia sudores
nocturnos, fiebres, escalofríos, picazón, falta de apetito, perdió
peso, dolor de cabeza; la madre de Oliver, a la que llamaremos
Mariana, decía que lo tuviera se lo estaba consumiendo en vida.
Fue
en octubre, cuando Mariana llevo su hijo al medico, pero por la falta
de reactivos para los exámenes de sangre, que no fue hasta finales
de noviembre cuando detectan la enfermedad, es en diciembre cuando
los resultados que arroja que tenia un cáncer, un linfoma no
Hodgkin.
Ese mismo
mes comenzó el protocolo para este tipo de pacientes, le dijeron a
la madre de Oliver que fuera al seguro social a retirar unas
medicinas, la doctora les advirtió que la procarbazina oral(
Procarbazina es
un agente
alquilante indicado
como quimioterapia en
el tratamiento del linfoma
de Hodgkin1
y
algunos tipos de tumores
cerebrales,
tal como el glioblastoma
multiforme.
Su mecanismo de acción consiste en unirse de forma covalente al DNA,
para inhibir el crecimiento de las células cancerosas de forma no
selectiva.),
esa medicina no la había y que esa era necesaria por el tiempo que
dure el tratamiento, usualmente unos dos años.
Pasaron
2 semanas buscando los fármacos sin éxito, como la abuela de Oliver
también tenia cáncer, Mariana conocía a muchos profesionales de la
salud en esa área, entonces Mariana comenzó a divulgar por las
redes sociales la necesidad de medicamentos; por suerte una doctora,
la puso en contacto con una dueña de farmacia, que consiguió las
medicinas en la provincia de Táchira, se los enviaron por correo
ordinario, donde vivía la familia de Oliver.
Trascurrieron
los meses y los fármacos se agotaron sin posibilidad de
recuperación, pero aun así Oliver quería ir a la escuela para
estar con sus compañeros, habían pasado dos meses que no los veía
y los extrañaban, pues entre los demás niños y profesores era muy
querido, cuando llego todos los abrazaban y uno de los últimos días
que fue al colegio, su maestra Estrella cuenta que en la hora del
recreo, todos los niños salieron corriendo y cuando se percato era
Oliver vestido como Michael
Jackson, pues Oliver era fanático de aquel cantante, se identificaba
con su estilo y decía que cuando grande quería ser como su ídolo.
El
20 de abril de 2016, Oliver recayó con fiebre y empezó a
convulsionar; estudios practicados arrojaron que fue infectado por
una bacteria que derivo en meningitis; cuando se supo lo de su
enfermedad, Oliver queda en sala de aislamiento del hospital, pero la
misma no estaba en condiciones optimas, entraba polvo, había
cucarachas, mosquitos, moscas, ratos, alguno que otro perro callejero
que entraba, en fin…, en general no estaba limpia y los
profesionales de la salud, aunque muy competente no tenían los
insumos para atender a este tipo de pacientes.
Aunque
no consiguieron los antibióticos, anti convulsivos y demás insumos,
para la meningitis, a los 22 días le dan el alta a Oliver, porque
supuestamente estaba mejor. Cuando Mariana llego a la casa noto a su
hijo débil y muy desmejorado en general, casi no comía y cuando
ella intentaba de hablar con Oliver, el le decía: madre déjame
descansar, al punto que llego a no poder hablar y a los 3 días
volvió a convulsionar, se lo llevan al hospital, donde entra en
estado de coma y comienza el recorrido de médicos y familiares para
buscar terapias intensivas; en los hospitales públicos de plano no
había cupo y en uno no estaba en condiciones
Mariana
hablo con su esposo al que llamare Rómulo, como el tenia un seguro
por su trabajo que cubría a toda la familia, admitieron a Oliver a
terapia intensiva en una clínica privada, aunque esta vez
consiguieron los antibióticos, las medicinas para las convulsiones
no las encontraron; inclusive la madre de Oliver se escribió en
redes sociales de gente que tenia este problema y aun así no
consiguieron los fármacos.
Entonces
el 30 de mayo del 2016 a las 8:30AM fallece Oliver Rodríguez, aunque
sus familiares, en especial su madre quedaron devastados, ella lo
recuerda con un ser de luz, alegría y paz, por eso como cosas de la
vida el día de su entierro, habían en el cielo muchos pájaros,
sobre todo palomas blancas y un sol radiante.
No
podemos decir que este es un final feliz pero si nos deja una
lección, la gente que de un modo u otro que se han beneficiado de la
dictadura de Maduro, les va faltar vida pera pagar lo que están
haciendo; porque los padres de Oliver no tengan una estampita de Trump
en el copete de su cama, de lo que puedo estar segura es que lo que
se hace en esta vida, en esta vida se paga, tu familia espera que
estés en un plano superior lleno de luz, como te lo mereces, Oliver.
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