Perfil público

Fermín Costas

Mar del plata - Argentina

Número de obras:1
Lecturas de sus textos:603
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Obras que ha votado:16

GRANTICO PALMANI ZUM

Mi nombre es Fermín Costas, nací en el año 86' con apenas 3 años perdí a mi abuelo José, mis padres están separados y tengo a mi abuelita Elsa con un grado intermedio de Alzheimer.
Vivo en mar del plata que es una ciudad balnearia de la costa atlántica, situada a unos 400 km de buenos aires. Se dice que el 25 de septiembre de 1860 Coelho de Meyrelles le vendió a Patricio Peralta Ramos sus estancias "Laguna de los Padres", "San Julián de Vivoratá" y "La Armonía", sumando un total de 136.425 hectáreas. Luego Patricio Peralta Ramos, compra a Benigno Barbosa el saladero. Todavía Mar del Plata, se llamaba "Puerto Laguna de los Padres".
En 1873: Patricio Peralta Ramos poco antes de morir su esposa, Cecilia Robles, estando con ella mirando el mar sobre la loma norte (lugar donde poco tiempo después construiría la capilla San Cecilia), se quedó maravillado por el reflejo plateado del sol en el agua del mar y ahí se convenció que le pondría Mar del Plata y fue éste el nombre que propone al pueblo, cuya fundación gestiona en su nota al gobierno provincial, el 14 de noviembre de 1873. Son datos casi sin importancia para algunos pero valiosos para quien ama esta ciudad.
Soy hijo de Adriano costas y Alma Martínez. Mi padre es descendiente de Brasileros y lleva con orgullo ese nombre que viene de por lo menos 5 generaciones. Mi madre es Alma y es humanamente maravillosa.
Tengo dos hermanos João (4 años menos) y Maia (8 años menos). Con el nacimiento de mi hermana menor mis padres se separaron y no es por echarle culpa sino que ellos no pudieron con la situación. Por esos años empezaba a aparecer la enfermedad y mi mamá entre el trabajo, nosotros, una beba recien nacida, vivía cansada mental y físicamente. Mi padre subestimaba lo que le pasaba con su suegra, entonces se acabo el modelo de familia ideal plus. Era raro para mi que nos pasearan por tantas casas, entre los amigos de mi viejo, sus hermanos, las tias y abuelas. Cada finde semana era un fixture diferente dónde casi nunca éramos locales. La que más se salvaba ahí era Maia por ser bebé, pero nosotros dos no teniamos ni idea a donde estaríamos los sábados para ver Nubeluz. Lo importante fue que pudimos mantener el ritual de desayunar siendo unos nubetores, luego la jornada seguía con supermatch. Nos encantaba asignarnos un color y competir, el que ganaba le compraba una golosina al otro o en su defecto la parte dulce de la merienda. Nos llevabamos muy bien con João. Luego todo se acomodó al menos por aquellos tatives... (Ver idioma glufico)
Hoy se dice que nuestra generación fue privilegiada por que estabamos hasta las 9 de la noche en la vereda en pleno verano, por que se jugaba al carnaval, las escondidas, al fútbol en 3 turnos y luego de adolescentes hasta salíamos a matinee. Todo en la vida tiene su parte buena y mala, pero nadie te cuenta de las infancias sin resolver de los padres, de la violencia con que se criaba y ni nombrar al machismo. Como criaban boludos frustados, sin confianza o lo que es peor, gente que no se desenvuelve en la adultez por que siempre tuvieron todo servido y no saben lo que es un sacrificio.
La separación nos marcó a todos pero hoy de grande creo que fue lo mejor, es en vano simular o criar hijos en un ambiente que no es el más adecuado sólo por el capricho de la familia ideal.
De todas formas de esas cosas lindas de esa época me acuerdo desde las golosinas hasta los dibujos animados, las tardes de verano donde nos pasabamos buscandole formas a las nubes e imaginando la adultez como Walt Disney.
Apesar de lo que pensaba mamá de los dulces , comí todo lo que me soportaron las muelas. Desde caramelos fizz que eran unos ácidos que te dejaban con todos los tantos, las gallinitas que era una base de oblea con un jugo adentro y forma de gallina ponedora.El topolin que traía una sorpresa y salía centavos, luego salió el huevo kinder con un juguete para armar y 3 deseos que nunca se me cumplieron. Caramelos de todos los colores, media hora, duros, semiduros, blandos, con gusto a chicle.
Hoy de grande ya no tengo el tiempo y ni me atrevo a buscarle formas a las nubes, sólo me queda un mate amargo y asentar con la cabeza cada recuerdo lindo.

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Interesado por: Me interesa la literatura en un sentido amplio, sin predilección de género, Microrrelato, Cuento corto / relato breve, Novela corta / nouvelle, Artículo / Crónica / periodismo literario

Autores o libros favoritos: Sábato, Cortazar

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