Ahora lo entiendo todo

No sabía que esa sería la última vez que me abrazabas entusiasmado, tampoco tenía idea que esa erala última vez que dormiría en tu apartamento, ni que me besarías con ternura. Evidentemente estaba demasiado ciego para notar que ya no me tratabas como antes, vaya, que hasta el perro me veía con diferentes ojos.

Soy tonto, porque a pesar de tener todas esas señales a los pies de mi puerta permití que el viento soplara, al final entraron demasiadas hojas secas y tardé muchos meses en sacarlas, aún lo hago.
Ahora lo entiendo todo, y está bien, mereces algo importante, quizás yo no era lo mejor en aquellos días y el universo te envió para enseñarme una lección. De alguna manera eras mi reflejo.

Ahora lo entiendo todo, recorrí un largo camino y lo volvería a hacer sin pensarlo. Te prometo que ahora lo entiendo todo.