Sofía

Sofía. Desde que tú llegaste es mas viva la vida, desde que estás aquí es más fácil sentir. Que hermosa se ha vuelto la luz atrapada en el destello de tus ojos, no le permite transcurrir al tiempo. Que grandes son ahí los momentos, donde no existen las horas.

Sofía, desde que te conocí, la imaginación se ha apartado del pensamiento para mudarse hacia el corazón, mezclando la realidad con la fantasía en un mismo sueño. Sueño que juntos llamamos vida, sueño que compartimos despiertos.

Sofía, desde que tú llegaste la bondad se ha hecho costumbre, la alegría una rutina. Que fácil es sonreír recordando tus pequeños dedos empujando mis mejillas. Que sencillo fue aprender que perdonar y querer son ambos sentidos de la misma avenida.

Finalmente Sofía, hasta que tú llegaste pude por fin entender, que en los asuntos de la magia, lo importante no está en ver, sino en sentir. Pues tú me enseñaste que antes de saber vivir, se debe aprender… a jugar, a la vida.