Agonía de un corazón roto.

Soy Sofi, y Sofi, está rota, muy rota.

Ya no queda nada de lo que un día fue.

Aquella niña que amaba jugar con las flores ya no está

aquella que sonreía por casi cualquier cosa, apagó su sonrisa.

No queda nada de lo que un día fue, no queda nada ya.

Soy Sofi y Sofi está rota, demasiado rota.

Me cuestiono ¿Cómo puedo ser tan mala? Incluso para ser yo misma.

Quisiera sacar de mis entrañas el corazón.

Pero… ¿amo solo con el corazón?

Creo que lo sentimientos son más complejos, si pretendo reprimir todo lo que aún resguardo

debo, arrancar mi mente, para no pensarle.

Y el estómago, que también reacciona cuando le pienso.

Y como dije, el corazón, para que no palpite tan fuerte cuando escucho su voz en mi mente.

Soy Sofi, y Sofi está rota, muy rota.

¿Y lo roto solo corta?

¿Como no lastimar si es lo único que se hacer?

¿Cómo amar sin depender?

Si es que, con solo pensarte, cualquier paisaje se vuelve más hermoso

el día dejar de estar nublado, las aves cantan y los árboles florecen.

Verte sonreír, podría perfectamente ser el objetivo de mis días,

Y aunque la mayoría de ellos, no logro este objetivo,

No pierdo la esperanza de verte de lejos.

Mientras tanto, te veo todo el tiempo en mi mente, cuando cierro los ojos.

También te escucho, cuando me quedo en silencio.

Estás, aunque no estés, estás.

Lo bueno de haber tocado fondo es que,

cuando creí que la soledad y el silencio eran abrumantes

me di cuenta, al encontrarme en la cúspide de la autodestrucción, que,

no eran tan malos, la soledad y el silencio, me acerca más a ti,

a todas las fotos que tomó mi mente de tu rostro, cuando aún podía verlo.

Soy Sofi y Sofi está rota, demasiado rota…..