borradorEl internado: No te enamores en el cuarto 10 capitulo 3 «el amanecer»

Indigo sentía su interior arder, el deseo era mutuo. Parecia casi que imposible de creer. Sus besos eran apasionados e intensos. Sentía sus labios recorrer los suyos, su lengua a sus labios a una velocidad perfecta y sus mordiscos esquisitos. Indigo se levantó no resistía, le quitó el croptop a Hanna para encontrarse con los senos más perfectos que había visto en su vida. los lamió con pasión, hubo una buena reaccion. Ella estaba encima de elle, se besaron de nuevo casi como una necesidad. Sentía que iba a explotar. Indigo no recordaba haber sentido esto. Se acosto para sentir a Hanna moverse encima de ella. Tenía tanta fuerza y enrgía. Esto continuó por rato. Indigo la tomo y se puso encima atrayendola a si mientras tocaba todo su pecho y la besaba, la mordia con cuidado y la lamía en lugares inesperdos. Decidieron conectarse, entrecruzaron las piernas y movieron sus caderas con cambios de velocidad. Indigo veía estrellas. Hanna le atraía demasido y compartir este acto de deseo parecía irreal.

Estaban sudando, la cama sonaba demasiado. Decidieron parar para no desperatar a todos. Notaron que la ventana estaba abierta. Indigo volvió a su cama y Hanna la siguió. Se abarzaron con una calidez como si fueran uno. Indigo sintió que queria quedarse asi para siemopre, cuidandola, amandola. Que? ya estaba pensando en amarla? se detuvo y solo disfruto del momento, sin expectativas. La luz exterior del pasillo al que daba la ventana se encendió, Hanna entró en panico. Se asomaron pero no había nadie. Cerraron la ventana, fumaron y se volvieron a abrazar. Hanna estaba mas nerviosa pero Indigo la calmo con sus brazos y su paz. Sentía que desprendía una luz muy potente y cálida. Las caricias de Hanna sobre sus brazos era algo que nunca había sentido. Ella tenía una manera de tocar que le pareció fuera de este mundo, el ritmo la energía. Era realmente para quedarse alli siempre. «No quiero enamorarme» dijo Hanna muy acurrucada en el cuerpo de Indigo. Indigo no prestó atención estaba muy feliz.

Poco a poco Indigo cayó en un suño profundo y confortante. A la mañana siguiente tardo un poco en darse cuenta de donde estaba y de recordar lo que había pasado anoche.Las pastillas para dormir generaban ese efecto de sentirse perdido. Hanna estaba dormida en su propia cama al igual que todas las demás. En que momento se había pasado de cama?

Indigo estaba flotando, se dirigió al baño a tomar una ducha, tenía demasiada energía. Eran las 5:00 am y queria ver el amanecer para agradecer por lo que había ocurrido. Pero pronto recordó algo que Hanna había dicho la noche anterior «No quiero enamorarme». Que había querido decir? Que fue algo de una noche? Este pensamiento le causó dolor.

Se dijo a si misme que no tomaría la iniciativa y le daría su espacio a Hanna para que ella decidiera como quería continuar. Se fue a desayunar y no vio a Hanna. Era normal, los primeros ingresos dormian hasta tarde por falta de costumbre. Recuerdos de pedazos de la noche anterior, la sensación de tenerla en sus brazos le venían a cada rato.

«Indiguito, estas menos conversona, callada. Estas bien?» Le dijo Amelita

«Me dormi tarde, estoy como zombie» le contestó Indigo. Pero en realidad estaba pensando en Hanna y en que se suponia que debía hacer. Seguir su corazón o solo hacer como que nada había sucedido.

Cuando terminaron el desayuno, hicieron labores (se supone que es terapeutico), y luego fueron a la terapia que le llamaban encuentro. Todos compartieron como se sentían es día. Fue breve. No había señales de Hanna.

Cuando estaban recogiendo las sillas que estaban en circulo y las ponian una encima de otra en una esquina, Indigo escuchó la puerta del cuarto 10 abrirse. Esta dejo salir a Hanna.

Indigo sintió un vuelco en el corazón…