La Ansiosa Tormenta: Capitulo 1

La Ansiosa Tormenta: Capitulo 1

Institución Educativa Élite del Extremo Norte

CAPITULO UNO

Hace 17 años:

_¿Por qué tengo que ir? 

_Porque somos una de las familias afortunadas de pertenecer a la élite, agredecele a tu hermano mayor por tal privilegio. _rodeo los ojos con un cansado suspiro al escuchar la simple respuesta de mamá. 

Siempre que le pregunto lo mismo, responde también lo mismo. 

_Pero, mamá. No quiero estar entre un montón de gente refinada presumiendo su categoría y mucho menos, ¡Casarme con alguien de ese lugar! 

Frena el transporte móvil, y aspira mirando al cielo suplicando por mas paciencia. 

No tengo la culpa de ser igualita a ella. 

_Se dice, contraer matrimonio, Verena. Pareces como de una casta inferior _me mira_. ¡Cita las palabras correctas!

_¡Pues no quiero contraer matrimonio con nadie de esa cárcel! 

_Por supuesto que no es una cárcel, es una estancia educativa de alto ¡muy alto!, prestigio. Y por favor, madura, acabas de llegar a 18 años. 

Me cruzo de brazos a la vez que ella vuelve a conducir. 

_¿Que haré en una «estancia educativa» _hago comillas con los dedos_, creyente del presente cuando creo en el pasado? 

_Eres una creyente del pasado pasiva _remarca mas la última palabra_. No una osada. Así que compórtate, que no solo tu futuro está en juego, la reputación de tu hermano también. 

_Si, como sea. 

_Por favor. 

_Que si, lo entiendo. _giro mi cuerpo y presiono el botón para activar la ventana a mi lado. 

Estaba bien en la ciudad, la capital para ser exactos, podía terminar mi ciclo académico ahí y tendría mas opciones para contraer matrimonio con alguien que tenga una posición ni tan baja ni tan alta. Pero, la señora Rayser llegó a la magnífica idea de volver a meter a su hija en el maldito colegio o «estancia académica» de la Élite después de 7 estupendos años. Menuda tontería de idea. 

Admito que el bosque es hermoso. Espera. ¿Un bosque?. 

Yep, un bosque.

A los lados del camino del que se guía mamá, hay lámparas, supongo que para alumbrar en la noche. Después de unos veinte minutos apróximadamente, llegamos. Me doy cuenta de ello por las letras forjadas de hierro diciendo «Institución Educativa de la Élite» en la parte superior de un arbusto tan alto que parece una especie de muro decorado con flores de colores claros.

_¿Eso cómo se abre? _pregunto. 

Mamá pone los ojos en blanco. 

_Cuando tengas hijos, te lo digo como madre con experiencia, no los aisles en un techo de campo, o los convertiras en unos ignorantes, como yo lo hice. 

Frunzo el ceño ofendida. 

_¿Es una indirecta? 

Se encoge de hombros. 

_Tómalo como tu quieras. _dice antes de salir del movil para así ir a un cabina que no vi antes. 

Escribe algo y vuelve. 

Entonces activa la sincronización inalámbrica del transporte. Aparece en la ventana frontal el holograma saludándonos. 

_Bienvenidos a la intitución educativa de la Élite, la estancia estudiantil mas célebre del Mundo Abierto. Les deseo un buen recibimiento de la tarde, desde este punto yo seré su guía. Por favor, prosiga. 

Entonces el muro de arbusto se abre de forma automática. Pues, un portón secreto es… genial. No soy tan orgullosa. Por cierto, no recuerdo esto cuando entre a la institución al llegar a 6 años, ni cuando salí con 11 años.

Mientras la señora Rayser conduce el holograma sigue con la presentación. 

_Como sabrá, después de la revolución, muchas cosas cambiaron, eso incluye el modo de gobierno de la Tierra, como era llamado Mundo Abierto en la era pasada. Desde hace dos siglos y actualmente, nuestro planeta ya no está conformado por continentes y países. 

Escucho atenta, soy de esas personas que cualquier cosa que lee u oye, lo hace con mucha atención. Además, este holograma si que resume bien Historia. 

_Le llamamos, los Cuatro Extremos, Norte, Sur, Este y Oeste. La Élite principal es conformada por ocho integrantes, donde cada dos se encargan del manejo de cada extremo. Lo curioso de esto, es que cada extremo tiene los mismos derechos cívicos, pero con diferentes leyes y modos de vivir. Mientras que en el Extremo Oeste se encuentra la vida salvaje y en una fuerte comunicación con la naturaleza, el Extremo Sur es el extremo con mas avances tecnológicos debido a la pandemia que sorprendentemente después de dos siglos, aún no tiene señales de terminar. Mientras que el Extremo Norte se siente muy orgulloso de tener a la institución educativa única y exclusiva de nuestra amada, Élite, dentro de sus murallas. 

Entramos en una expecie de túnel oscuro donde sus paredes nos muestran imagenes de los cuatro extremos. Es sorprendente como se diferencia uno del otro. 

_La institución tiene como propósito, preparar a sus estudiantes con la mejor calidad de educación, para ser los siguientes trabajadores en la Élite y por supuesto, encontrar a su compañero o compañera en su vida marital como lo conforma nuestras leyes, Pero no te preocupes si no tienes en tus planes trabajar en la asociación que rige Mundo Abierto, tu puedes escoger la profesión que gustes pero, el colegio de la Élite es la única estancia donde puedes escoger a tu pareja. 

Una vez que salimos quedo anonada por lo hermoso que es el lugar. Me recuerda a las ilustraciones que veía en el techo de campo. Un diseño de la época victoriana en Reino Unido según lo que el texto decía. Saber que ahora no existe y está el extremo norte en su lugar.

Eso parece un… castillo literalmente. 

_Buenos estudios. 

Salgo del movil con la mirada completamente puesta en el frontal del lugar. Un edificio con 4 niveles, hecho de piedra por lo que parece y con unos picos en sus laterales e inluso mas allá, sin duda es o fue un castillo. Dejo de contemplar el hermoso decorado cuando alguien me habla de frente. 

_Muy buen recibimiento del sol, estamos muy a gusto con su regreso señorita Rayser. 

Bajo la mirada a ver a un joven de entre unos veinticinco a treinta años, con unos lentes que lo hacen ver bastante simpático. 

Me encanta el uniforme que lleva puesto. 

_¿Cómo sabes mi apellido? _pregunto al darme cuenta cómo me llamó.

_No solo su apellido es lo que sé, señorita Verena Rayser del Norte. _sonríe amablemente.

Ok, ya me dió miedo.

_Pero le responderé, usted inició su primer año en el centésimo aniversario del colegio, forma parte de la unidad de afortunados que según un viejo presagio de Mundo Abierto; cuatro de los estudiantes con las familias mas poderosas y ejemplares serían parte de la principal élite y tendrán sobre sus hombros el deber de elegir a un excelente compañero o compañera para compartir su vida marital incluyendo el gobierno de su extremo indicado. _declara con un pequeño rastro de emoción. 

_Y yo… 

_¡Si! Usted es parte de aquellas cuatro familias, los apellidos que gobiernan la institución. Dejó mucho de qué hablar cuando se retiró hace 7 años, yo en ese entonces no trabajaba aquí pero es lo que me contaron. 

Mi mandibula está… abierta, es decir, se desencajó desde hace un buen rato pero ahora lo está mas al igual que mis ojos. Dios, ¿como es posible que yo no lo sepa?

_Es lo que pasa cuando te aislas 4 años en el campo y otros 3 en la capital. _dice mamá a mis espaldas. 

Rayos, lo dije en voz alta. 

_Pero, esto es por mi hermano. 

Ella sonríe orgullosa. 

_Tu hermanito es un hombre brillante, Ascendió con los años. 

La miro y por fin comprendo que Lennon no es un simple trabajador en la élite. Hizo que el apellido Rayser fuera una explosión que llegó hasta la insitución mas prestigiosa del planeta. 

_Bueno, damas _vuelve a la conversación el joven con lentes cargando mi equipaje que conctituye de dos maletas y el bolso que yo misma cargo_, es hora de empezar con la despedida. 

Vuelvo mi mirada a mi mamá y no necesitamos decirnos una palabra, nos abrazamos muy fuerte por el tiempo suficiente. Se que ya no puedo hacer nada para detener esto, así que con todo el dolor del mundo abierto, la suelto, me sonríe y yo también lo hago. Se da la vuelta hasta entrar al transporte.  

No volteará.

Sé que mi mamá y yo somos bastante parecidas tanto en lo físico como en la personalidad, Y se que si vuelve a mirarme, no se irá sin mi. Así que yo y el joven de lentes giramos de nuevo hacia el colegio. Doy un suspiro antes de volver a hablar. 

_Muéstrame la tan célebre Estancia Educativa de la Élite. 

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