Una Colección de Otras Notas

Las cosas sin sentido.

Los recuerdos son hermosos para reírnos, para entender lo que vivimos, y se van convirtiendo en anécdotas, y luego de un tiempo si estas al óseo, vienen a la mente y nos hacen reír, y si te vieran otras personas creerán una locura, pero lo raro es que a todos les pasa.

Y nos imaginamos lo que puede ser diferente, lo que puede ser real, y lo es.

Y como no entendemos nada de lo que pasa en esta hermosa vida, y sonreímos, que bien que la veo cuando tienes todo lo que en una vida deseas, piensas eso cuando quieres crecer y buscas todo lo tuyo. Llega la luz del sol y sientes la brisa de las cosas inusuales. Por eso llamamos locura a las cosas que nos sorprende y entendemos lo que disfrutamos para conocernos más.

Y en la mañana, mientras camino, contemplo la luz que cruza entre las hojas de los árboles y que no es mucho, no obstante, me hace sentir la paz que deseo, estará unos segundos, pero lo vale, lo vale demasiado.

No espero que todo el mundo lea cada hoja que escriba, aunque sea un desconocido, entenderé demasiado que lo que sentí en un momento llego a alguien, o los que están alrededor nuestro. Necesitamos palpar todo lo que vivimos y sentirnos a nosotros mismos para que sea un buen momento. La verdad no entiendo las realidades que percuten en los estados que nos alcanzan a acompañar, sentimos paz cuando la necesitamos, y antes, qué pasaba antes de que la pidieras; o un poco de calma cuando ya estás demasiado estresado. Colecciona las oportunidades, cuestiona los pensamientos que te hacen sentir inquietante, tienes esencia, pero no sabes cómo es, porque amar pueden todos, pero quien realmente lo vive de una forma diferente. Así que acepto la crítica de los demás, acepto que me mires en silencio y que otras notas respalden los sentimientos que tenemos mutuamente, pero que son paradojas encerradas en un frasco que no tiene sentido abrir.

Ayer miraba las estrellas en la madrugada de un domingo de primavera, vi claramente como el cielo estaba tan limpio y que las estrellas estaban tan limpias que deslumbraban su belleza y llenaban las ideas de más ideas. Es increíble cómo puedo llegar a crear cosas sin sentido o con, no lo sé y es satisfactorio para mi alma porque realmente llenan mi ser. No sé cómo describen a los escritores, soy uno bueno y eso es suficiente, origino en mí.

Las opiniones de los demás me interesan, no me sobrellevan. Y no diré: vos vas a opinar, o vos vas a criticarme, que chiste tan sofisticado. Tenemos libertad de expresarnos y nadie podrá quitarnos la imaginación, un pensamiento realista de un ser que se apasiona por deslumbrar, así quedará.

Sin duda alguna me siento tan fuerte cuando sé quién soy, porque no hay nada más hermoso que descubrirse; tal vez no entiendas nada, pero fluye dentro de mí lo más bello  e intento saber más. Y tú eres unas de las piezas fundamentales del ajedrez más aburrido que se pueda armar, aunque entienda de que eres de este modo y no quieras cambiar, y que en el fondo sé que eres alguien mágico, impetuoso y sobre todo que el ser un poco cursi te tiene atemorizado, sin embargo, lo eres. Absolutamente, veo tus ojos, y me estremece saber que las cosas han cambiado desde una diferencia, desde una pregunta hasta una respuesta que me lleva a saber que estaremos juntos.

No he tenido miedo a nada, solo saber que puede que haya un final, aún tengo en portarretrato del primer beso, que nos apasiono darnos. Las acaricias en las mañanas, los deseos de estar el uno con el otro, el desvelarnos al ver películas, las horas que pasamos en las rutas de la provincia, el silencio después de que discutíamos por estupideces, no entiendo nada de que lo que pase sea bueno o sea algo totalmente desafortunado.

Presiento que las cosas van a cambiar, y será algo notable y lo veré con lágrimas, después habrá una sonrisa, en el que suspirare notablemente que los deseos son osados y que cuentan algo sin importancia de los sentimientos.

Las tazas de té, se mancharon. Estuvieron ahí por mucho tiempo, contemplaba como la luz del sol se atravesaba por las hojas de un naranjo, y veía el polvo en el aire, no sabía quién era en ese momento, perdí la esencia, en la que me deleitaba enamorarme. Si ahora me preguntas, no sabría que responderte. Y no sé. En el interior tengo demasiadas preguntas que fueron respondidas. No sé qué está pasando conmigo mismo, así que hasta aquí será. Si hay palabras de consentimientos por favor grítamelas, desgárrate la garganta hasta que escuche que me hablas, que quieres darme el último suspiro para que vuelva a estar, por favor (haz una pausa), por favor.

Y no eras tú, siempre fui yo.

Solamente quedan pocas cartas sobre la mesa, viejas canciones de modas que son parte de la vida, y me pongo a pensar que no tienen sentido, pero despiertan aquellos que hacen palpitar más el corazón. No tengo ni idea ya de lo que pasa aquí, así que abre los ojos, sonríe que será el próximo capítulo.

Miraba para todos lados y no entendía las cosas que pasaban, no me importa ahora el qué dirán. Estoy tan cansado de las palabras vacías, así que, si quieres gritar y decir lo que sientes, hazlo, no hay crédito en esto, eres tú.

Tal vez no tenga sentido de lo que pasa y es por algo. Mayormente si ves a tu alrededor, no tendría sentido que lo que nos pasa sea eterno.

Aunque sé que hay nuevos comienzos, y respiramos para continuar.

Antes de ayer me preguntaba las cuestiones de la vida, espero en esa respuesta que más me interesaba, un mensaje de texto o un cambio, más allá de lo que paso entre nosotros, era pensar en lo que fuimos y dejo de ser por unos segundos. Entonces entendí que es un fin. Paralelamente todo lo que es resaltado en una página de apuntes es el momento lo que nos interesa, en estos días viaje para que fluya algo distinto, estaba esperando que sea un descanso un final y un principio, y sabes que aún falta, que mis pasos sean más, pero debo saber cuántos más.

Hasta mis propias palabras me aburren y no tienen sentido de lo inusual que pienso, para sobrellevar el tiempo, así que perdóname porque te estoy aburriendo, ya las ganas no son las mismas. Antes era antes, ahora no hay forma de que tome el control de las cosas, es mi interior en el que nada está fluyendo como rio, y eso, me preocupa bastante.

Estoy completamente cansado de la rutina en lo cual todo es para el mismo fin, y descubres el cansancio que esta ahí.

He aprendido y que es momento de tomar un pequeño tiempo y por esas razones creo que es conveniente, muchos sueños por cumplir, por creer.

Singular.

El frío ha llegado más rápido de lo habitual, es diferente en esta época del año, y solo falta un mes y ya. Y si, recuerdo que escribí de ti en la misma época, en una página sencilla en la que te nombraba como la persona más feliz de esa estación.

La verdad no tengo inspiración de ningún tipo.

Escuchaba música para poder, aunque sea escribir un par de párrafos, pero nada, será porque estoy mal contigo. No estoy en este momento aquí, creo que sabes a qué me refiero, ni siquiera puedo mirarte a los ojos como años atrás.

Caminamos en silencio entre pasillos estrechos, dormimos abrazados, pero realmente no sé si tengo sentimientos para hacerlo de corazón.

Si realmente importa lo nuestro y te pido que por casualidad me digas te quiero, el te quiero más sincero, acompáñame a tomar un café en un bar que no conozcamos y sentémonos a la orilla de la ventana y que la respiración de mi cansancio emocional empañe el vidrio y escriba algo tonto como «seguir».

Creí que es para siempre, debí asegurarme antes que ya caminar un buen trecho, eso me haría sentir endeble. Mientras estaba escribiendo de puño y letra esta página, recordé algo que me pasó la última vez de una persona de quién me enamoré. No te preocupes, no es nada ya, quedo muy lejos, pero fue la misma sensación. Tal vez encuentre una respuesta si me dejas contarte, qué pasó en un momento, una parte de mi vida. Tal vez no te conté todo de mí.

Me entretengo muy fácil, me puse a ver una película no tan vieja, pero me gusta mucho, porque habla de la vida. Si, entiendo que son varias páginas y que no son como las anteriores, es obvio que no y comprendo que soy feliz. Tengo la ventaja de ser diferente, de ser yo y de escribir otras notas.
Te cuento que estoy tomando otra taza de té y tengo ganas de llorar, no lo sé, me cuesta saber que siento o qué pasa por mi mente. Me gustaría sentir el viento correr, así que salí afuera para ver si me sorprendía, me puse un suéter de color verde, me lo regalaron. Ni siquiera es tarde, y el escritorio está ahí, esperando que termine o continúe de escribir.

Conmocionados, el momento que percibimos al enterarnos de qué queremos en la vida. He notado que te quedas en la puerta, sobre el marco y observas que hago. Admiras a alguien que te prometió el para siempre.

¿Tienes miedo a ser feliz?

Seguiré mañana, ahora escucho un poco de música y siento que es especial, esa canción es algo especial, se titula «héroes». Y me preguntó si los hay en la vida de muchos. No hay motivos para decirnos adiós, sabes que mi cabeza tiene delirios, pienso de esta forma al creer que solo pasará.
El frío nos hace recordar que hay algo que nos muestra de afuera, nos muestra que podemos soportarlo hasta cierto punto y convivir. Deseo abrazarte y demostrarte que aún te quiero, será aceptable, pero quiero tener fuerzas para poder hacerlo y que me devuelvas al amor escondido entre los dos y que el orgullo se desvanezca. Los fuertes vientos del sur llegan, la taza vacía dejo de ser, ahora está lavada y enjuagada, y lo más hermoso es que recuerdas que me gusta a esta hora, un té.

Nos hemos notado a los ojos, sé que fueron tan solo unos segundos, y siendo honesto, fue lo más hermoso en la semana. Dentro de unos días será invierno, hace frío, demasiado, los abrazos en la mañana y en la noche son muy afables.

Me has dicho que te vas a casa de tu madre para que escriba tranquilo y te detuve, piensas que es otra tonta historia como esa que inventé en el verano pasado; te llevo tiempo leerla y al final de las catorce historias me dijiste que estaba solo bien, que no superan ninguna como la primera que fue lo que escribimos los dos.

No tenemos una crisis, no tenemos una perdida, solo nos tenemos.

Posdata, sin recuerdos.

Solo falta más de este tiempo.

Estaba viendo la biblioteca y creo haber leído todo, simplemente suspiró.

Me preguntó por qué el amor es así. Te deja ciego, te distrae, te pone torpe, te vuelve loco, no te deja dormir, te hace creer que puedes imaginas un futuro y al último del día solo piensas si puedes ser feliz. Cómo saber si te enamoras de la persona correcta, cómo sabes que llegará, así que creí que les da oportunidad a todos. Lo dije una vez, y lo volvería a decir todas las veces que sean necesarias. El viento es tan poderoso, y nos conviene o no, pero de vez en cuando necesitas, sentirlo como un compañero que va y viene.

A muchos nos gusta la segunda parte, y hay algunas muy buenas, y está la escribo por mí. Y una vez que termine sabré un poco más de uno mismo y la leeré las veces que quiera y podré entenderme más.

La nieve cayó pero no se quedó ahí, queremos, es bella; aunque desaparezca quieres que esté ahí porque hay lugares que nunca ha estado. Lo deseamos, estará y luego tendremos recuerdos de que sí, es posible, de que vivimos lo mejor; por eso cuando conozcas el amor deja que solo sea un recuerdo, hermoso.

Para que veas que tiene que ser hermosa la vida.

Llegará el momento de que quede una posdata, en que la carta tenga escrito de algo de alguien especial y que la tinta quedé permanente en un viejo papel, que quede guardado en la vieja caja de madera. La llovizna en invierno me parece acogedora, pasearía por ella aunque las luces queden tenues y solitarias en las calles de un viejo barrio, donde las calles son de tierra.

El aire fresco del invierno lo deleitó tan bien, y recién comienza, al comprar el pan tenía en mente tomar un café antes que llegue la noche; me agradaba ver qué estabas, en mis recuerdos. He hecho una copia de tu aspecto en mi mente y deseo, entonces no te olvido, nada de ti: ni de tú perfume, ni cuando parpadeas, y deseo decirte «hola».

Es bueno tener momentos incómodos en la vida, momentos que miramos el cielo y vemos las maravillas que nos rodean. El vapor saliendo de la pava, me tienta a tomar otra taza de café o de té, y me río, me dicen que parezco un anciano, vuelvo a reír. Somos muy diferentes entre nosotros y te veo ahí, y aún no caigo, eres tan real, y te puedo decir que te amo las veces que quiera porque ahora es así. Y volveré a dormir abrazándote, en ese momento salí afuera y el cielo era estrellado, y el viento siguió soplando más que ayer. La cena está lista, claro que no la preparaste, eres muy pésimo en la cocina, pero el gesto de comprar pizza es bueno. Aunque confieso que tus asados son muy ricos, con una copa de vino.

La historia es buena, sé que la llamé diferente, pero así se me vino a la cabeza y tengo ganas de que te guste como la anterior, sé que ya lo dijiste y en más por alguna razón lo volví a escribir que nada supera a la única, que te cautivo pero esta es especial también. No entras donde esta el escritorio ni por más que te diga que pases, recuerdo que me decías que vez una magia dentro, que no es tu mundo, pero realmente eres parte del mismo. Imagino y disfruto.

La noche es fría. Te sientas y lees un libro de la biblioteca, tú pasión por leer a crecido y lo único que lees es recomendación de mis propias palabras; y verdaderamente el frío es intenso, las manos se me congelan, vienes a cada momento y refriegas con tus manos y me preparas el té que me gusta de cada mañana. He dejado pasar el tiempo, y ya no quiero, no lo voy a hacer. Es solo arriesgarse, creía que todo podía ser diferente y complejo, y pensamos creer que no es para nosotros lo bueno y nos conformamos con lo que hay, ¿Será certero lo último?

Otra noche fría en la ciudad, no se será igual en otro lugar, lo doy por hecho.

No quiero terminar solo, no.

Y te tengo en brazos, y confiar es dudoso si tengo de retaguardia al destino, el reloj  continuado su camino y las acciones del tiempo han dado su pericia al estar observando el fin. Y si pudiese pedirle algo, lo que suena tentador, no sabría lo que realmente pediría por qué se te cruzan un montón de cosas, dependerá del motivó, de la circunstancia de lo que más quieras. Entiendo las situaciones de la vida, apesta totalmente y ahora sé que quiero. Confía en ti mismo, algo bueno viene.

Lo que más vale.

No tengas miedo de lo que eres o de que no eres; abraza a quien quieras y guarda ese mejor momento para el peor; háblale a la persona que no conozcas y se tú, que es impórtate.

Buscamos el mejor momento, como cuando hace frio, necesitamos el calor y viceversa, y así es en la vida, ecuaciones simples.

Quisiera caminar en una senda, en un lugar desconocido, donde el contorno del mismo haya bancas rusticas, luces tenues, neblina, silencio y viento suave.

Hay solo tres asientos vacíos, el frio entra por una de las ventanas abiertas y en una de las ventanas se ve el reflejo de una persona que quiere saber más de sí mismo; queriendo llegar a entender más de los misterios de las sensaciones y sentimientos ya que actúan de igual manera que el tiempo, cuando es inesperado.

Lo que no vale es perderlo, he intentado a veces no hacerlo, entonces pretendo creer en algo más. Era difícil y seguirá siendo, expresar lo que sentimos ya que es tan dulce deleitarse en ser.

Te debo muchas respuestas de las que no quisieras saber, y tengo la certeza de que será bueno, solo recuerda que lo que siento por ti no cambiara más, ya no. Quédate en silencio un momento, siente el calor del viento en pleno invierno, saben llamarlo veranito de San Juan, me he reído bastante al escucharlo. Sopla intensamente haciéndose notar al igual que las estrellar en la noche.

No te desilusiones al ver quien soy o lo que leas cuando tengas estas hojas en las manos. No quiero heriste, ni que te sientas mal por mi culpa, te recuerdo que mis ganas por seguir abrazándote no se han ido, mirarte y que sepas que lo disfrutare, con unos pocos segundos me sobran y bastan, ver tu rostro y así guardarlo y no olvidarme que eres único.

Hoy sinceramente pensé en ti, aunque solo fue un instante, recordé parte del pasado en el que nos conocíamos, te comportaste en ocasiones muy estúpido. Y en esas circunstancias me deje guiar por las apariencias y no tiene sentido recordarte por lo que eras, ya que necesitabas cambiar, eso me lo aclaraste.

Y ponerme a pensar que tengo ganas de volver a conocerte, si te preguntas por qué, no sabría decirte realmente. Conocerte es lo que más quiero.

Tienes la libertad de preguntarme lo que quieras, mientras creas que es bueno.

Muchas veces es difícil, y a lo mejor seguirá siendo así, expresar lo que somos. Y tengo la necesidad de contarte más de mí. Te debo muchas respuestas de las que no quisieras saber, y no sé si será una mala decisión, solo recuerda que lo que siento por ti no cambiará más, ya no. Quédate en silencio un momento, siente el calor del viento en invierno, en este día seco, donde sopla intensamente haciéndose notar que está ahí. Pertenecemos a este mundo, aunque veamos con nuestros ojos, no valdrá mas de los que sea, pero es necesario que sepamos algo más, y eso ayuda, ese es el sentido.

Las dos páginas.

Mientras bailábamos en el comedor, los mejores sentimientos nos absorbían en una especie de torbellino y en nuestro ser sentíamos que nos decía que todo cambiaria sin importar lo demás. Porque te das cuenta que la vida, seguirá siendo difícil, subes de nivel por todas las circunstancias, y ves que no acaba porque el objetivo es único, el de ser feliz. Y si no te das cuenta es porque tus intereses no dependen de nada, y solo he querido tener a alguien y lo eres.

Ahora veo que el amor es la mayor prueba, un infinito de lo mejor y lo peor; deberíamos renunciar, al parecer sigue siendo un gran objetivo de la vida que es amar. Y así completamos una página de que es y otra de que será. He tenido las fuerzas para hacerlo, y superare contigo toda circunstancia, donde creo fervientemente que puedo decirte te amo, y una vez más, te amo, es infinito.

Aquello lindo del mundo, lo aprovecho y que no quede en el olvido, que recuerde siempre lo dulce que es, en una foto podría ser. Hace tiempo atrás, me recosté y estaba pensando en alguien, que hoy solo es un recuerdo, vi en esa persona lo perfecto que veo en ti ahora, y no sé si fue un sueño, pero sentí un beso. Luego de eso, no lo volví a ver más. Te preguntaras porque escribí eso, aunque no te respondería solo se me vino a la cabeza; no sé cómo seguir y talvez me digas que soy un tonto. Así que analizando esto, deberíamos de soñar primero, creer en eso, que el amor es tan difícil.

Te quiero demasiado, espérame, tenme esa paciencia. Eres una excelente persona y siempre te dije que me va a doler demasiado si te lastimo el corazón.

Si no hay silencio.

Luego de un ruido se espera un silencio, y no sé cuál es el que más me interesa, ambos son importantes. Me ha costado horrores escribir cada palabra, y cada vez que termino de hacer una parte siento que le falta algo, y me doy cuenta que el silencio es incómodo. Deseo que el dolor internamente termine, hay una ausencia tan grande dentro del corazón, aun esperando una respuesta de todo. No voy a poder dejar de amar a nadie, porque mi tonto corazón cree que hay alguien ahí, aun esperando.

Unas canciones siguen repitiéndose, canto, trato de buscar las respuestas correctas o las formulo para que sean así. Cierro los ojos, imagino que camino en el campo y que con las palmas de las manos las arrastro por los pastizales a la altura de la cintura, como de película; y la soledad del silencio me acompaña y siento la paz. No sé si estoy loco o es normal, dentro de mi tengo miedo a que nada pase, a que todo termine y que el reloj ya no avance, solo sé que te quiero por más que pase todo. Y si no hay silencio prefiero que lo haya, para entender que un simple abrazo nos una más que palabras. Como duele esta sensación en tengo en el pecho, una tristeza, tomarte de la mano y que no la apartas.

Qué pasa en mi mente, o solo ocurre para que me inspire, y tome la lapicera y escriba, para que alguien lea y se entretenga. Realmente, lo único es para que comprenda los sentimientos de alguien que es diferente y especial.

Una simple acaricia en la mejilla te hace sentir seguro.

El sol baja muy lentamente, se anuncia a la mitad del mes que otra estación se acerca, algo va a cambiar y no sé cuándo será, espero que pronto.

No hay lagrimas sin dolor, de felicidad muy pocas, las cuales son las más difíciles de conseguir. Si al final del día puedo sonreír, es bueno. Ya no basta tener cosas, eso no es lo que necesitamos, mientras tengamos paz con nosotros mismo basta.

Cuando llega el final de una historia, esperamos que nos guste, sentirnos conforme, sonreír, pero, sobre todo, amar.

Aún no termina.

Después del final, después del punto, todo termina, aunque parezca ese detalle no es el último, alguien puede continuar la historia. Pensamos que es nuestra y de pronto aparece una nueva.

Puede que se repita nuevamente la misma sensación como si fuera un poema.

Ya que cada palabra debería terminar haciéndote sentir bien y complacido, despejando las confusiones de lo habitual. Aun los pasillos fríos del trabajo, me hace sentir que no tienen vida aquellos que están ahí y, claramente estoy incluido, suspiro fuertemente. Ahora cierro los ojos e imagino que viajo por la ruta a un lugar desconocido y solitario, y al estar ahí, sentir el viento, cerrar los ojos, estar bien, muy bien. Y volviendo a la realidad, dentro de casa, encerrado con una lapicera escribiendo palabras sueltas para historias con un poco de sentido para que sean buenas al leer.

Qué te parecen las historias románticas. Esas que son un drama en la vida del silencio.

No leas en voz alta, que sea tu mente la que le de vida a este mundo que quiere vivir. He olvidado las distintas formas de expresar las palabras ocultas de sentimientos, imagino un lugar inhóspito del cual solo está muy oculto, donde hay un viejo puente, un vaso de agua sobre una mesa llena de polvillo y donde el sol sigue brillando después del punto final. El cielo azul no se distingue porque las nubes lo recubren, una farola colgante ilumina tenuemente y cortinas que cuentan los secretos.

No encuentro las palabras adecuadas, no es la tinta, ni las hojas.

Anoche se presentó una leve llovizna la cual fue inspirativa, fue tan corta que pude escribirla en otra hoja que todavía no podrás leerla, aun no.

Hola.

Mira a tu alredor, respira profundamente y dime que ves.

Mira las estrellas, siente el viento del sur que sopla con la fuerza que le queda y siente el invierno que ya se acaba. Aprecio el tiempo que estás conmigo, me encanta tu mirada, misteriosa, tus pasos en la que caminas feo, no cambiara. Todo lo difícil, es en este momento, intento que sea diferente como siempre, pero no pasa.

Muchos sentimientos se mezclan en mi mente, en mi corazón, en mi razón de ser.

Sigo intentando ser más.

Los días se han puesto optimistas y no encuentro el por qué, o así los necesita uno. Creo en ti, demasiado, y aprecio profundamente. Tus ojos dicen mucho.

Me siento protegido.

Sonríes en las mañanas, despierto en tus fuertes brazos. Te vas a trabajar y al salir dices adiós, y al vernos dices hola, en ese momento tocas mi mejilla derecha y dices: “te amo”.

Estas notas, volver y saber quién soy, quien eres y quienes somos. Para descubrirnos.

Otras notas.

Han pasado tres años, o tal vez más, y muy lentamente. Y saber que mis lágrimas dejaron de ser para ti, porque ya no estas.

Me resulta difícil escribir, comprender tantos sentimientos juntos y faltantes. Los trayectos de la vida son, y los latidos del corazón no son los mismos, no sé por qué tiene que ser así.

Déjame verte otra vez, déjame verte sonreír, déjame creer que el amor me dé la oportunidad de que eres bueno. Veo como el sol sale, y siento que las mañanas siguen siendo un sueño.

Abrázame como lo has hecho antes, levántame con tus fuerte brazos, mírame a los ojos, sonríe, y dime algo estúpido, una vez más. Eres mi compañero, mi defensor, mi amigo, quiero abrazarte y no soltarte, la luz nunca se apaga, siguen brillando la de las calles, viajamos en moto y somos nosotros, fuertes y llenos de vida, nadie nos detiene y no dejaremos de ser.

No entiendo la colección de preguntas que tengo en la cabeza y las respuestas que puedo encontrar. Y así mismo has partido de mi lado, pero entiendo que solo te he amado.

Quedan notas, quedan otras, quedan en mi corazón.

Y mi última lagrima, la que de verdad siente todo, es la que será para siempre.                                                                                                                                      

                                                                                                                             Por ti.