Hasta el último aliento.

Cómo cambia la historia…

En su momento hubo un canario que se convirtió en Monarca, esa mariposa que después de años decidió emigrar a unas playas sinaloenses sin saber que un Kraken se la iba a tragar y momentáneamente iba a desaparecer.

Desde ese momento se perdieron esperanzas, se quebraron ilusiones y se derramaron lágrimas, hubo desesperación, porqué aquellos corazones que latían por ti, perdieron la congruencia, perdieron sensibilidad, dejaron de pensar en momentos cruciales, momentos donde no solo era el leer los rumores de tu despedida, si no el duro enfrentamiento contra aquel dragón viajero por el mundo, el menos amigable, aquel que convirtió tu plaza y las del mundo entero en un lugar abandonado, aquel al que llamaron SARSCOV.

Por qué quién iba a pensar que tu nido iba a dejar de temblar, que tus luces de un momento a otro se iban a apagar y que tus gritos se dejarían de escuchar, que ni un alma apasionada se postraría en tus filas por un largo tiempo porque esos millones de pulmones que durante un largo tiempo supieron hacer despegar el vuelo que por ratos no sabías implementar, por que eras tan enorme que otros miles vivían en tu espalda como guerreros aferrados a proteger un reino lleno de colores, tus alas mojadas lograban secarse con el aliento que los inmortales disfrazados de mortales te otorgaban, antes de un terrible aterrizaje.

Quien iba pensar que a tu casa iba llegar un nuevo genio sin lámpara, el cual supo conquistar a tu dama con joyas, barcos, oro, playas y demás. Por qué no, no fue por ganas, que tuviste que mudarte o perderte en las fuertes olas que corrían por esos mares. 

De esa manera las cosas cambiaron, la tempestad, trajo la calma y la calma hizo que resurgieras como algo más grande.

Resurgiste como el canario que te dio la vida y te escribió una historia, en aquel ejemplar amarillo que se hizo más grande que el fénix desde tu nacimiento hace 48 años, hiciste crecer miles de sonrisas y regresaste millones de ilusiones que parecían perdidas y desperdiciadas, demostraste con tu ausencia que el amor existe y que los que te aman son capaces de apoyarte hasta el último aliento.

NOTA: Está crónica fue inspirada en la venta del equipo Monarcas, Morelia. 
Mucho antes de el resurgimiento de Atlético Morelia y su llegada a la liga de expansión.  

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