La vida ha pasado rápido o lento, hace años dejaste de sentir lo que sucede en esta vida, creíste tener todo controlado, te has dedicado a vivir un día a la vez, en el sentido de no tener una meta, un sueño, o un destino, simplemente el plan era un día a la vez… pensaste que todo estaría resuelto pues no te preocuparías, no te estresarías, no lucharías por algo material o espiritual, sólo vivir o sobrevivir hasta en el día que dejes de respirar, y dijiste me haré mayor y no tendré a donde ir, sinceramente en tus adentros pensabas morir a los 40 o 45 si mucho, pero si no tenías el valor de dejar de respirar a esa edad, te preguntabas si estabas lista para vivir como indigente, pues realmente no te estabas construyendo nada, y no tenías nada, tu respuesta es, no lo se, ya que nadie te recordará y no habrá quien te busque o simplemente desaparecerás en otro país en un refugio o quizá en la calle vivirás.
Pero te detienes a pensar cómo llegaste a esto, cuando moriste , tratas de recordar cuando dejaste de sentirle sabor a la vida, cuando empezaste a emocionarte por instantes, cuando empezaste a expresar felicidad solo para que creyeran que estabas bien, solo para que no te preguntaran nada, cómo logras quedarte callada cuando te dicen “tú puedes, eres valiosa, eres especial, felicidades” o cosas así haciéndote sentir el ser más infeliz de la tierra, porque lo realmente quisieras es un abrazo eterno, quisieras explotar y decir que no estás bien, que estás vacía, que tú ser no puede más, pero listo te limitas a sonreír y hacer chistes, porque así no te dirán nada y quizá sea lo que quieren ver, pero solo tú sabes que estás muriendo lentamente.
Todos te ven y lo que ven no es nada de lo que tu sientes, eres luz por fuera y oscuridad por dentro, en tu interior quieres que alguien encienda una vela, pero como lo harán si nunca los dejas , no pueden hacerlo porque solo ven luz en ti, es la imagen que te has creado y no dejarás que nadie vea tu realidad, aunque gritas para ser salvada, para despertar y ver que existe algo más que un día a la vez, existe un futuro contigo misma, una vida bonita que puedes construir y estás a tiempo, sabes que el problema no es que estés sola, el problema es SENTIRTE SOLA, el problema es no romper tu capa de felicidad para sanar de verdad, niña es necesario que te rompas para que te vuelvas a construir, piensas que si te quiebras tu oscuridad quedará al descubierto y acudirían a darte amor y palabras de consuelo , que no necesitas porque te hacen sentir débil y rápidamente empiezas a formar tu caparazón escondiendo tu oscuridad, evitando a toda costa que sientan compasión o lastima por ti, porque no pues romper tu imagen de que estás bien, eso sería hablar mucho y evitas eso.
Ella se quedó en la oscuridad y recordó que de niña fue bendecida con una varita mágica que le permitía dibujar su mundo perfecto, así que la busco y al encontrarla su sonrisa se quedó estática, pues ella sabía que tenía que empezar a escribir, un futuro, un sueño, una meta, y dar pasos firmes, buscar al hada de la la oscuridad y entregarle tu oscuridad a ella para que pudieran hacer un trueque, pero tú sabes que para eso te debes quebrar y reconoce qué hay cosas que te duelen y nunca has dicho, para ello debes hablar y dejarte ver cómo eres, así que empiezas a dar pasos pequeños para llegar a liberarte y entregar esa oscuridad que no te pertenece,
Pero niña tú helado de mango se termina deber continuar brillando, con tu oscuridad encerrada.
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